Aún con la seguridad de la Procuraduría de la Nación de tener pruebas contra la controvertida senadora Piedad Córdoba, distintos sectores sociales y políticos consideraron que se requiere prueba demostrada.
La senadora dice a los cargos por presuntos vínculos con las FARC, que se trata de una persecución contra su forma de trabajo humanitario.
Mientras el partido liberal al que pertenece, y el ex presidente Ernesto Samper, guardaron margen de reserva sobre la decisión de la Procuraduría, la presidenta del partido Polo Democrático, Clara López, observó que la decisión era esperada por la continua presión desde estamentos de gobierno.
El presidente del Congreso, Armando Benedetti, afirmó que será la justicia la que decida, con elementos válidos, si existe alguna responsabilidad de la senadora Córdoba con presuntos vínculos con guerrilla.
El senador Roy Barrera del oficialista partido Unidad Nacional –U enjuició a su colega Córdoba y puso en duda su gestión humanitaria.
La defensa de la senadora Córdoba confirmó la iniciación del trámite para la contrademanda y la denuncia ante los organismos internacionales de justicia y derechos humanos.