Esperanza y tragedia en el Día Mundial de la Vida Silvestre

Voluntarios en Nueva Zelanda tratan de salvar a ballenas varadas el 10 de febrero, de 2017.

Este viernes se conmemora el Día Mundial de la Vida Silvestre destinado a celebrar y crear conciencia de los animales y plantas silvestres.

Cada año más especies son agregadas a la lista de las Naciones Unidas sobre especies en peligro. Activistas advierten que se necesita una drástica acción para salvar muchas especies de la extinción.

La autopsia a una ballena varada en la costa de Noruega en enero reveló que su estómago estaba completamente lleno de plástico. El trozo más grande era de más de dos metros de largo.

Se cree que muchos mamíferos marinos confunden por alimentos trozos de plástico flotando. Activistas como Louisa Casson, de Greenpeace, dicen que eso está teniendo un efecto devastador y han pedido a las compañías que reduzcan el uso de plástico.

“Doce millones de toneladas de plástico entra a los océanos cada año, lo que equivale a un camión de basura cada minuto. El plástico ingresa a cada cadena de alimentos en el océano y las criaturas marinas desde zooplancton hasta las ballenas azules se están asfixiando con el plástico. Lo están ingiriendo y se están enredando en él”.

La ONU advierte que en todo el mundo la actividad humana está acabando con la biodiversidad.

El tema del Día Mundial de la Vida Silvestre este año es “Escuchen las voces jóvenes”. Pero muchos activistas advierten que las futuras generaciones pude que nunca vean muchas de las especies que existen hoy dado que muchas están al borde de la extinción.

En muchas partes de África, elefantes y rinocerontes están bajo gran presión de los cazadores furtivos.

China, el mayor mercado para el marfil, anunció una prohibición en diciembre a todos el comercio de marfil. La medida entrará en efecto a fines de 2017 y ha sido calificada como fundamental por parte de activistas.