El movimiento de protesta de Siria denuncia que el régimen ha "detenido o desaparecido" a 8.000 personas en las seis semanas de manifestaciones en todo el país, según una organización de defensa de los derechos humanos.
Pese a ello, los militantes anunciaron que continuarán con la "revolución y las manifestaciones".
Cerca de 150 estudiantes realizaron una sentada de solidaridad con Deraa, indicó un militantes de derechos humanos, que fueron dispersados por los servicios de seguridad.
"Continuaremos nuestra revolución y nuestras manifestaciones pacíficas en toda Siria hasta que obtengamos la libertad", declararon el martes los comités de coordinación de las manifestaciones en varias ciudades, entre ellas Banias (noroeste), Homs (centro) y Deraa (sur), esta última epicentro del movimiento de protesta y asediada desde hace una semana.
Laas fuerzas de seguridad arrestaron a casi 500 personas y mataron a otras 10 el pasado lunes, según la agencia estatal de noticias de Siria.
Testigos en la conflictiva ciudad de Daraa, en el sur de Siria, dijeron que soldados respaldados por vehículos blindados recorrían las calles en un intento permanente de reprimir las protestas contra el presidente Bashar al-Assad.
Residentes en Daraa dijeron que las fuerzas de seguridad sirias detuvieron jóvenes de 15 años de edad y mayores, y acordonaron los vecindarios.
Un portavoz del gobierno dijo que los soldados mataron a 10 “terroristas”.
Los informes dicen que las tropas están detrás de destacados abogados y activistas en Daraa, que ha sido el centro de la insurrección de Siria desde hace seis semanas.
Combustible, agua, energía y las comunicaciones de la ciudad se han visto alteradas en los últimos seis días. Se dice que escasean los alimentos.
Grupos de derechos humanos aseguran que al menos 560 civiles han muerto en los disturbios en todo el país.
En tanto, los medios estatales dijeron este lunes que el Ministerio del Interior emitió un comunicado llamando a aquellos que cometieron “actos ilegales” a entregarse hasta el 15 de mayo.
El comunicado dice que aquellos que vayan a las autoridades y entreguen sus armas estarán exentos de castigo.