Amazon ha generado un frenesí inmobiliario.
Un condominio de tres dormitorios con vista a Manhattan que durante meses estuvo disponible a la venta por 1 millón, 700 mil dólares, súbitamente está atrayendo a posibles compradores ahora que Amazon anunció planes de construir parte de sus segundas oficinas centrales en Long Island City, Nueva York.
Las búsquedas en Internet para viviendas en Long Island City, durante mucho tiempo un área industrial en el distrito de Queens, se dispararon 248% la última semana, dijo la compañía de bienes raíces Redfin. Las búsquedas en la otra sede elegida por Amazon, Crystal City, Virginia, subieron 84%. Agentes de bienes raíces dicen que están escuchando de inversionistas que quieren convertirse en propietarios, así como de vendedores que han decidido retirar sus viviendas del mercado y esperar a que los precios suban.
El aumento de interés ha seguido a la selección de Amazon de esas dos áreas para recibir 25.000 nuevos empleos cada una con un salario promedio de 150.000 dólares al año.
Las dos localidades ya reflejan las súper costosas áreas metropolitanas de Nueva York y Washington, aunque las ventas inmobiliarias en esas zonas han estado relativamente sin cambios recientes. Ahora, hay preocupaciones de que los precios de viviendas en ambos lugares, tanto para inquilinos como para compradores, van a marginar a todos, salvo a los más acaudalados, en los próximos años.
Desde hace tiempo la misma tendencia ha sido evidente en ejes tecnológicos como San Francisco, San José, California; y Seattle, donde Amazon está basada. En esas ciudades, a las familias de ingresos bajos y moderados se les complica cada vez más encontrar viviendas asequibles cerca de sus lugares de trabajo.
Con información de AP.
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Dos mercados inmobiliarios se calientan en espera de Amazon