Estefania Villarroel aún no cree que en tan poco tiempo pudo reunirse con su familia en Estados Unidos.
“El proceso es muy rápido, yo tuve la respuesta en tres días y me siento súper, súper feliz”.
Estefanía está entre los cuatro venezolanos que ingresaron al país, el sábado a través del nuevo programa migratorio anunciado por la administración Biden, el 18 de octubre, que en principio beneficiará a 24 mil personas.
“Me hicieron una pequeña entrevista, colocaron esto en mi pasaporte para yo estar bien por dos años aquí”.
Según el Departamento de Seguridad Nacional, los primeros admitidos llegaron vía aérea desde México, Guatemala y Perú.
En un comunicado, el ente gubernamental indicó que cientos de solicitantes han sido revisados y aprobados bajo la única vía legal migratoria que ha dispuesto para los ciudadanos de la nación suramericana.
Para postularse se requiere tener un patrocinador en Estados Unidos, que tenga un estatus legal y solvencia económica.
En el caso de Estefanía, su hermana es ciudadana estadounidense.
“Lo tuvo que demostrar para así mi proceso avanzar”.
La medida busca restringir el ingreso irregular de venezolanos a través de la frontera sur, que se ha reducido en un 85% desde su anuncio el 12 de octubre, según datos oficiales.
La aplicación de la norma por parte de México y Estados Unidos ha sido criticada ampliamente por grupos defensores de los migrantes, entre ellos Human Rights Watch.
Para el organismo, la política de deportación inmediata de venezolanos en los puntos fronterizos es “abusiva”, y la vía legal dispuesta es “excluyente”.
Jorge Agobian, VOA.