Barak Obama ofreció su primera gran rueda de prensa luego de ser reelegido el pasado seis de noviembre. La economía, tema central de sus declaraciones.
El presidente Barack Obama ofreció este mediodía una conferencia de prensa en donde tocó una variedad de temas desde los escándalos de los militares, el abismo fiscal y la reforma migratoria, entre otros.
Pero el presidente comenzó diciendo que dado que la “economía se esta recuperando, nuestra prioridad son los trabajos”.
Advirtió que el país encara “una fecha limite muy clara que nos obliga a tomar decisiones”, pero que está dispuesto a nuevas ideas de republicanos o demócratas, insistiendo en su tema de campaña de que “si bien se pueden cerrar algunos hoyos en el código impositivo, en lo que respecta al 2% de los estadounidenses más ricos, ellos deben estar dispuestos a pagar un poco más”.
“Me entusiasma oír a republicano tras republicano estar de acuerdo en que necesitamos más entradas”, dijo, recalcando que “las matemáticas tienden a no funcionar cuando solo se piensa en recortar el gasto”.
“Solo hay una manera de cumplir con el reto y eso es trabajando juntos”, afirmó, pero agregó que “No deberíamos mantener de rehenes a la clase media mientras debatimos los recortes de impuestos mientras debatimos recortes de impuestos a los ricos”.
Sobre el escándalo Petraeus
Interrogado sobre el escándalo de infidelidad que provocó la renuncia del director de la CIA, General David Petraeus, Obama dijo no quererse pronunciar “porque todavía no hay suficiente información”, pero dijo que el General Petraeus había tenido una carrera extraordinaria y que sirvió en el gobierno con mucho éxito. Sin embargo, “por su propia conclusión, no llegó a cumplir con las normas necesarias como para seguir en la CIA”.
También dijo que por el momento no tiene evidencia de que durante el intercambio de correos entre Petraeus y su amante, o entre el General John Allen y su amiga Jill Kelly, se haya revelado información que pueda afectar la seguridad nacional.
Sobre la reforma migratoria
El mandatario también reconoció que la reforma migratoria está dentro de las prioridades de su gobierno para este segundo período. “Estoy confiado que podemos hacer la reforma migratoria”, dijo.
“Espero poder presentar una propuesta de ley muy pronto, tan pronto como después de mi toma de posesión… de hecho ya han comenzado algunas conversaciones”, afirmó, agregando que la reforma debería presentar un camino claro hacia un estatus legal para los indocumentados.
Pero el presidente comenzó diciendo que dado que la “economía se esta recuperando, nuestra prioridad son los trabajos”.
Advirtió que el país encara “una fecha limite muy clara que nos obliga a tomar decisiones”, pero que está dispuesto a nuevas ideas de republicanos o demócratas, insistiendo en su tema de campaña de que “si bien se pueden cerrar algunos hoyos en el código impositivo, en lo que respecta al 2% de los estadounidenses más ricos, ellos deben estar dispuestos a pagar un poco más”.
“Me entusiasma oír a republicano tras republicano estar de acuerdo en que necesitamos más entradas”, dijo, recalcando que “las matemáticas tienden a no funcionar cuando solo se piensa en recortar el gasto”.
“Solo hay una manera de cumplir con el reto y eso es trabajando juntos”, afirmó, pero agregó que “No deberíamos mantener de rehenes a la clase media mientras debatimos los recortes de impuestos mientras debatimos recortes de impuestos a los ricos”.
Sobre el escándalo Petraeus
Interrogado sobre el escándalo de infidelidad que provocó la renuncia del director de la CIA, General David Petraeus, Obama dijo no quererse pronunciar “porque todavía no hay suficiente información”, pero dijo que el General Petraeus había tenido una carrera extraordinaria y que sirvió en el gobierno con mucho éxito. Sin embargo, “por su propia conclusión, no llegó a cumplir con las normas necesarias como para seguir en la CIA”.
También dijo que por el momento no tiene evidencia de que durante el intercambio de correos entre Petraeus y su amante, o entre el General John Allen y su amiga Jill Kelly, se haya revelado información que pueda afectar la seguridad nacional.
Sobre la reforma migratoria
El mandatario también reconoció que la reforma migratoria está dentro de las prioridades de su gobierno para este segundo período. “Estoy confiado que podemos hacer la reforma migratoria”, dijo.
“Espero poder presentar una propuesta de ley muy pronto, tan pronto como después de mi toma de posesión… de hecho ya han comenzado algunas conversaciones”, afirmó, agregando que la reforma debería presentar un camino claro hacia un estatus legal para los indocumentados.