Legisladores estadounidenses afirman que el gobierno cubano les impidió viajar a la Isla este fin de semana.
Los congresistas planeaban evaluar los potenciales riesgos a la seguridad nacional asociados con la reanudación del servicio aéreo a Cuba.
La delegación estaba encabezada por el presidente de la Comisión de Seguridad del Territorio Nacional, Michael McCaul, republicano por Texas, quien en un comunicado afirma que: "Mientras la administración Obama despliega la alfombra roja para La Habana, el gobierno cubano se niega a ser abierto y transparente con los representantes del pueblo (estadounidense)".
"Lamentablemente parece ser más fácil para los cubanos venir a Estados Unidos que para los legisladores de la Comisión de Seguridad del Territorio Nacional llegar a Cuba", agrega McCaul.
John Katko, presidente del Subcomité de Seguridad en el Transporte, otro de los legisladores en el frustrado viaje a Cuba, acusó a la administración (Obama) de estar "ansiosa de que tantas personas como puedan visiten Cuba, excepto por las que intentan examinar la infraestructura de seguridad cubana".
El republicano por Nueva York describió las preocupaciones del grupo legislativo por cuestiones de seguridad que asegura no han sido respondidas por la Casa Blanca.
"Aún no sabemos si Cuba tiene en funcionamiento los escáneres de cuerpo adecuados y los sistemas de detección de explosivos, si tiene la tecnología para detectar pasaportes o identificaciones falsas, si son o cómo son revisados los trabajadores de aviación y si los oficiales de seguridad a bordo (Federal Air Marshals) podrán volar misiones a Cuba en vuelos comerciales", explicó.
"Desde la llegada al aeropuerto, a la revisión de seguridad y la subida a bordo, los pasajeros solo tendrán contacto con personal del gobierno cubano", añade Katko, quien afirma que "la administración trabaja aceleradamente para abrir los aeropuertos cubanos a los viajes entre Estados Unidos y Cuba mientras cierra los ojos a graves preocupaciones de seguridad en momentos de un aumento de las amenazas terroristas".
Hasta el momento ni la Casa Blanca ni el gobierno cubano han comentado el incidente.