Padres indocumentados en Estados Unidos están inundando las oficinas de defensores de inmigrantes y buscando ayuda para asegurar el cuidado de sus hijos americanos en el caso de que sean deportados bajo las nuevas directivas de inmigración en el gobierno de Donald Trump.
La Coalición para Derechos Humanos de los Inmigrantes en Los Angeles (CHIRLA por sus siglas en inglés) ha estado recibiendo unas 10 solicitudes al día de padres que quieren nombrar guardianes temporales para sus hijos, dijo el vocero de la organización Jorge Mario Cabrera. El año pasado, el grupo recibía unos dos pedidos al mes de ese tipo y de servicios de Notaría.
A pedido de la organización sin fines de lucro, el Sindicato Nacional de Abogados, en Washington D.C., hizo un llamado esta semana buscando abogados voluntarios para ayudar a los inmigrantes a llenar formularios en los que otorgan a amigos o familiares el derecho de tomar decisiones legales y financieras en su ausencia.
En Nueva Jersey, la abogada de inmigración Helen Ramírez, dice que está recibiendo hasta seis llamadas diarias de padres. El año pasado, señala, no recibía ninguna.
"Su mayor temor es que sus hijos terminen en casas de acogida", dice Ramírez.
El gobierno de Donald Trump ha ordenado a las agencias de inmigración que hagan respetar más enérgicamente las leyes migratorias por lo que un mayor número de inmigrantes están siendo detenidos.
Para los padres de ciudadanos estadounidenses que son objeto de deportación, los agentes policiales de Inmigración y aduanas (ICE), "ayuda hasta donde es posible para que los padres puedan hacer arreglos para sus hijos", dijo la vocera de la agencia, Sara Rodríguez.
La ayuda puede incluir acceso a un abogado, funcionarios consulares y familiares de padres detenidos para firmar poderes, o solicitar pasaportes y comprar boletos de avión si los padres deciden llevar a los niños con ellos.
Randy Capps, del Instituto de Política Migratoria (MPI), una ONG con sede en Washington que analiza el movimiento de la gente en todo el mundo, dijo que aunque hacer planes de contingencia es buena idea, no cree que el nivel de temor sea justificado.
En el anterior gobierno del demócrata Barack Obama, la posibilidad de que ambos padres fueran deportados era baja, dice Capps, y duda de que haya un gran cambio bajo el republicano Trump.
"La posibilidad sigue siendo muy baja pero no tanto como antes y esto solo es el comienzo de este gobierno", dijo.
Se cree que unos cinco millones de niños menores de 18 años viven por lo menos con un padre indocumentado, según un estudio de 2016 del MPI. La mayoría de los niños, un 79% eran ciudadanos estadounidenses, según el estudio.
En el segundo trimestre de 2015, ICE deportó a 15.442 padres que dijeron tener al menos un hijo americano, según los datos de la agencia. Obama fue criticado por ser el mayor deportador de inmigrantes ilegales, después que expulsó a 400.000 personas en 2012, más que ningún otro presidente en un solo año.
En 2014, el gobierno de Obama comenzó a enfocarse en una población más selectiva de inmigrantes, los que habían recién entrado al país o habían cometido delitos graves.
Trump ha dicho que también hará de los criminales su principal blanco para las deportaciones.
Con información de Reuters