El canciller francés y el gobierno mexicano condenaron las prácticas de espionaje de EE.UU. y pidieron explicaciones de inmediato ante estos actos de intromisión.
Según un reportaje publicado en el diario francés le Monde basado en información filtrada por Edward Snowden, la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés) habría espiado también a Francia a través del registro de llamadas telefónicas y mensajes de texto.
La revelación se suma a la condena del gobierno mexicano por el también supuesto espionaje de sus comunicaciones electrónicas. La crítica se produjo después que una revista alemana publicó que EE.UU. espió los correos electrónicos de Felipe Calderón cuando era presidente de México.
Además también se informó que previamente la NSA, según documentos con fecha de 2012, habría intervenido correos electrónicos del actual presidente Enrique Peña Nieto antes de que sea electo.
En cuanto al espionaje a Francia la información señala que la NSA recopiló 70,3 millones de registros telefónicos en un periodo de 30 días a través de un sistema que grababa las llamadas automáticamente cuando ciertos números telefónicos se usaban repetidas veces.
De inmediato el gobierno francés pidió una explicación al embajador estadounidense del por qué EE.UU. espió a uno de sus más cercanos aliados.
El canciller francés Laurent Fabius dijo que exigiría una explicación de la práctica, que describió de "totalmente inaceptable".
Lo propio hizo México y a través de su cancillería envió un comunicado en el que expresan que "esta práctica es inaceptable, ilegítima y contraria al derecho mexicano y al derecho internacional”.
El reportaje en el diario francés publicado este lunes fue escrito por el periodista Glenn Greenwald, quien reveló originalmente el programa de vigilancia de la NSA, y otro colega, ambos describen que la operación también recopiló mensajes de texto sobre la base de ciertas palabras, entre el 10 de diciembre y el 7 de enero.
Programas similares se han revelado en Gran Bretaña y Alemania.
La revelación se suma a la condena del gobierno mexicano por el también supuesto espionaje de sus comunicaciones electrónicas. La crítica se produjo después que una revista alemana publicó que EE.UU. espió los correos electrónicos de Felipe Calderón cuando era presidente de México.
Además también se informó que previamente la NSA, según documentos con fecha de 2012, habría intervenido correos electrónicos del actual presidente Enrique Peña Nieto antes de que sea electo.
En cuanto al espionaje a Francia la información señala que la NSA recopiló 70,3 millones de registros telefónicos en un periodo de 30 días a través de un sistema que grababa las llamadas automáticamente cuando ciertos números telefónicos se usaban repetidas veces.
De inmediato el gobierno francés pidió una explicación al embajador estadounidense del por qué EE.UU. espió a uno de sus más cercanos aliados.
El canciller francés Laurent Fabius dijo que exigiría una explicación de la práctica, que describió de "totalmente inaceptable".
Lo propio hizo México y a través de su cancillería envió un comunicado en el que expresan que "esta práctica es inaceptable, ilegítima y contraria al derecho mexicano y al derecho internacional”.
El reportaje en el diario francés publicado este lunes fue escrito por el periodista Glenn Greenwald, quien reveló originalmente el programa de vigilancia de la NSA, y otro colega, ambos describen que la operación también recopiló mensajes de texto sobre la base de ciertas palabras, entre el 10 de diciembre y el 7 de enero.
Programas similares se han revelado en Gran Bretaña y Alemania.