Obama y Netanyahu liman asperezas

La reunión entre los dos líderes será posiblemente la última antes de que el presidente Obama termine su mandato en enero.

Ambos líderes se reúnen en Nueva York y reiteran sus compromisos bilaterales en materia de seguridad y los "lazos inquebrantables" entre ambas naciones.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama y el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu limaron asperezas y lo sellaron con un apretón de manos durante una reunión bilateral en el hotel Lotte New York Palace.

Los dos líderes se reunieron al margen de la Asamblea General de la ONU, en Nueva York y señalaron que pese a las diferencias existen "lazos inquebrantables" entre ambas naciones.

El presidente Barack Obama señaló que los vínculos con Israel se basan en valores comunes y lazos familiares. “Mantener a Israel seguro es importante para la seguridad nacional de EE.UU”, agregó.

Tanto el presidente Obama como el Primer Ministro Netanyahu aplaudieron el nuevo acuerdo de seguridad bilateral firmado la semana pasada entre ambos países en momentos de “enorme incertidumbre” en la región, dijo Obama.

“Nunca me daré por vencido por la paz”, señaló Netanyahu al confrontar retos en común.

Netanyahu surante su intervención reconoció que Barack Obama es “una voz influyente” que permanecerá por décadas.

Sobre el acuerdo de seguridad bilateral Obama mencionó que ambas partes tienen preocupaciones y reiteró que quiere ver una Israel “estable y segura” con una “tierra para palestinos” que cumpla cons sus expectativas.

La reunión entre los dos líderes ha sido posiblemente la última antes de que el presidente Obama termine su mandato en enero, dijo la Casa Blanca.

La relación entre Obama y Netanyahu se tensó y no logró recuperarse desde que el líder israelí se presentó en el Capitolio para presionar al Congreso estadounidense a no apoyar el acuerdo nuclear con Irán.

Comentarios periódicos de Netanyahu que sugieren que su posición sobre la solución de dos estados respaldada por Estados Unidos durante décadas no es seria, han afectado la relación con la administración Obama.

Pero esta vez, los líderes tienen a su favor un logro concreto como evidencia de que están trabajando juntos.

Israel, el aliado más cercano de Washington en el Medio Oriente, recibió hace poco una promesa de ayuda militar a 10 años por 38.000 millones de dólares, el mayor paquete de ayuda militar que Estados Unidos ha dado a un país.