Hillary Clinton comenzó oficialmente a planificar su gobierno, nombrando a su jefe de campaña, John Podesta, y a su asesora de larga data Minyon Moore, para preparar los planes de transición.
La candidata presidencial demócrata presentó documentos, en el Distrito de Columbia, para formar una organización sin fines de lucro llamada Fondo de Transición Clinton-Kaine.
La acción ocurre luego de varias semanas de reuniones entre la Casa Blanca y representantes de las campañas de Hillary Clinton y Donald Trump, su rival republicano.
Los candidatos -ahora que han sido oficialmente nominados- son elegibles para recibir informes de inteligencia del gobierno. Una ley bipartidista de 2010 exige a la administración saliente proveer espacio de oficina, computadores y apoyo tecnológico a ambos candidatos.
La idea es ayudar a los potenciales sucesores a planificar para asegurar una transición sin problemas.
Donald Trump eligió en mayo al gobernador de New Jersey, Chris Christie, para liderar su equipo de transición.
Podesta encabezará el equipo de Hillary Clinton y Moore será la secretaria, aunque ella aún no ha dicho quien dirigirá las operaciones de transición.
La mayor parte del esfuerzo del equipo de transición de Clinton se enfocará en crear listas de potenciales funcionarios de la administración y creará un mapa de ruta para su agenda política.