Líderes del Congreso no invitarán a Putin al Capitolio

El presidente de la Cámara de Representantes Paul Ryan de Wisconsin, (izquierda) habla junto a la legisladora Cathy McMorris Rodgers, republicana por Washington, durante una conferencia de prensa luego de una reunión del caucus republicano, el 24 de julio de 2018, en el Capitolio, en Washington.

El presidente ruso Vladimir Putin, acusado de interferir en las elecciones estadounidenses, no será invitado a dirigirse al Congreso o visitar el Capitolio si acepta la invitación del presidente Donald Trump para ir a Washington, dijeron el martes líderes republicanos en el Capitolio.

Los comentarios del presidente de la Cámara de Representantes Paul Ryan y del líder de la mayoría en el Senado Mitch McConnell reflejan la inquietud entre los legisladores estadounidenses, incluidos los republicanos del partido de Trump, sobre la invitación del presidente a Putin después de su cumbre del 16 de julio en Helsinki.

Ryan y McConnell rechazaron la idea de que se le pidiera a Putin que se dirigiera a una sesión conjunta del Congreso, que generalmente se considera un honor para los líderes extranjeros visitantes.

"Ciertamente no le daríamos una invitación para hacer una sesión conjunta", agregó Ryan. "Eso es algo que reservamos para los aliados".

"El presidente (de la Cámara de Representantes)y yo hemos dejado en claro que Putin no será bienvenido aquí en el Capitolio", dijo McConnell más tarde.

La comunidad de inteligencia de Estados Unidos concluyó que Rusia utilizó una campaña de propaganda y piratería para interferir en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 para ayudar a la candidatura de Trump, y advirtió que Moscú está trabajando para inmiscuirse en las elecciones legislativas de noviembre.

El líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, de Kentucky, derecha, habla con los medios el 24 de julio de 2018 en el Capitolio, en Washington.

"Los rusos deben dejar de interferir con nuestras elecciones", dijo McConnell a los periodistas, agregando que estaba abierto a una legislación para presionar a Moscú. "Lo hicieron la última vez. Será mejor que no vuelvan a hacerlo", agregó.

Ryan dijo que no tenía ningún problema con que Trump se sentara con líderes extranjeros como Putin, siempre y cuando él estuviera entregando el mensaje correcto.

"Si el mensaje es 'deja de inmiscuirte en nuestro país, deja de violar nuestra soberanía', entonces lo apoyo. Pero es el mensaje lo que cuenta", dijo Ryan a los periodistas.

Trump enfrentó críticas bipartidistas después de una conferencia de prensa con Putin en Helsinki, donde dio crédito a las negativas del líder ruso sobre la interferencia rusa en las elecciones de 2016 a pesar de los hallazgos de la comunidad de inteligencia de Estados Unidos.

Putin reconoció en la conferencia de prensa que quería que Trump ganara las elecciones contra la candidata demócrata Hillary Clinton, pero negó las intromisiones electorales.

Trump ha llamado a la cumbre un éxito e invitó a Putin a visitar Washington en el otoño.

Algunos republicanos expresaron un nuevo escepticismo sobre una visita a Putin. El representante Mac Thornberry, presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara, dijo: "Sospecho de todo lo que hace Putin".

Trump enfrentó críticas fulminantes después de la cumbre de Putin, incluida la del ex director de la CIA John Brennan, quien describió la actuación del presidente como "nada menos traidor".

La Casa Blanca dijo el lunes que Trump estaba buscando revocar las autorizaciones de seguridad de Brennan y otros cinco ex funcionarios que han criticado al presidente.

Ryan minimizó la amenaza de Trump, diciendo: "Creo que está molestando a la gente, honestamente".