EE.UU. investiga si Rusia colaboró en ataque químico en Siria

El presunto ataque con gas sarin en Kahn Sheikhoun, en la provincia siria de Idlib, controlada por rebeldes, dejó un saldo de más de 80 muertos y decenas de heridos. Abril 4, 2017.

Jefes militares de Estados Unidos investigan si Rusia colaboró con las fuerzas sirias en el mortal ataque químico contra civiles en la provincia de Idlib, esta semana.

"Creemos que tenemos una buena idea de quién los apoyó también", dijo un militar de alto rango a periodistas en el Pentágono el viernes.

El oficial agregó que las autoridades militares estadounidenses están "evaluando cuidadosamente cualquier información que pudiera determinar si los rusos sabían o ayudaron" al ataque.

Según los militares, como mínimo los rusos no pudieron controlar la actividad del régimen sirio que ha causado la muerte de civiles sirios inocentes. Dijeron también que Rusia fracasó en cumplir con su garantía de que las armas químicas de Siria serían eliminadas.

Las autoridades militares estadounidenses destacaron que hasta el momento no han visto evidencia de que los rusos estuvieron involucrados en el ataque químico. Sin embargo, señalaron que Rusia tenía una unidad de aviación en el aeropuerto donde se originó el ataque y "tienen experiencia química en el país".

Gráfica de los blancos impactados por Estados Unidos en el campo aéreo de al-Shayrat, Siria. (ImageSat International)

Los oficiales mostraron a los periodistas la ruta de vuelo del avión sirio que fue tomada el 4 de abril desde el campo aéreo de al-Shayrat hasta el pueblo de Khan Sheikhoun, donde más de 80 personas murieron en el ataque, que según médicos locales involucró el gas tóxico sarín.

Los militares estadounidenses agregaron que después del ataque observaron un pequeño dron volando sobre el hospital de Khan Sheikhoun, donde eran atendidas las víctimas del ataque químico.

"Unas cinco horas después, el dron regresó y el hospital fue atacado con municiones adicionales", dijo una de las fuentes.

El oficial dijo que Estados Unidos no sabe por qué el hospital fue atacado o quién llevó a cabo el ataque, pero ha determinado que potencialmente fue perpetrado "para ocultar evidencia de un ataque químico".

EE.UU. y Rusia mantendrán comunicación

Entretanto, jefes militares de Estados Unidos dijeron que se mantendrá una línea de comunicación con Rusia para evitar choques de sus bombarderos en el espacio aéreo sirio.

La afirmación contradice afirmaciones de Moscú, acerca de que había suspendido esas comunicaciones en protesta por los ataques con misiles a la pista de al-Shayrat.

La línea de comunicación es usada principalmente para asegurar que los aviones rusos y estadounidenses lleven a cabo misiones de combate en Siria pero no tengan confrontaciones involuntarias. Estados Unidos está usando el espacio aéreo para atacar a terroristas del Estado Islámico.

Washington usó la línea para informar a los rusos de su intención de lanzar el ataque con misiles, a fin de que adviertan a cualquier ruso que estuviera en la base, dijeron los militares.

Imagen del lanzamiento de uno de los misiles crucero Tomahawk lanzado contra Siria desde el portaviones USS Ross (DDG 71) en el Mar Mediterráneo. Abril 7, 2017.



Estados Unidos usó 59 misiles crucero Tomahawk para bombardear objetivos en el aeropuerto sirio, que incluyeron unos 20 aviones, hangares, lugares de suministro de municiones y radares, se informó.

Uno de los jefes militares del Pentágono dijo a la VOA que hay una zona en el campo aéreo atacado, que una vez fue usada como depósito de armas químicas. La fuente dijo que el ejército estadounidense no sabe si había o no armas químicas en esa área, pero por precaución para evitar potenciales bajas, no se bombardeó el lugar.

Otros oficiales militares dijeron a la VOA que tampoco se bombardearon las pistas del aeropuerto para no poner en peligro a los rusos. Agregaron que se usaron misiles tipo Tomahawk porque los ataques eran de "precisión y no para dejar cráteres".

Uno de los oficiales calificó los ataques como "adecuados, proporcionados, precisos y efectivos".

La oficina del presidente sirio Bashar al-Assad describió los ataques en un comunicado el viernes como "negligentes" e "irresponsables". La nota agrega que la acción fue "imprudente" y una continuación de la política de Estados Unidos de "subyugar a la gente".

Rusia, que provee tropas y apoyo aéreo al régimen de Assad, condenó la acción militar estadounidense calificándola como "una agresión contra un estado soberano", y dijo que estaba suspendiendo un memorando de entendimiento con Estados Unidos para la seguridad aérea sobre Siria.

La embajadora estadounidense en las Naciones Unidas, Nikki Haley, dijo el viernes que su país "dio un paso muy mesurado anoche", y agregó, “Estamos preparados para hacer más, pero esperamos que no será necesario".

Con la colaboración de Margaret Besheer.