Gigantes tecnológicas ayudan a convertir los automóviles en teléfonos inteligentes

Las grandes tecnológicas se han unido a los fabricantes de autos para optimizar el uso de servicios en línea, de modo que un auto funcione como un teléfono intenligente.

Las compañías de tecnología transformaron los teléfonos inteligentes y televisiones en fuentes de ingresos continuos. Ahora, las grandes tecnológicas quieren trabajar con las automotrices para hacer lo mismo con tu vehículo.

Cuando aún faltan años para el lanzamiento generalizado de automóviles autónomos, ambas industrias han convergido en la idea de que los vehículos ofrezcan servicios y características proporcionadas a través de las mismas redes inalámbricas de datos que utilizan los teléfonos inteligentes.

Esos servicios -reproducción de video, mejoras al desempeño del vehículo, comercio en el tablero- podrían ser la respuesta a una acuciante necesidad del sector automotor.

Las automotrices necesitan aprender cómo sacar más ingresos de su hardware después de que los autos salen de los locales de los concesionarios. Las tecnológicas ven a los automóviles y al tiempo que la gente pasa en ellos como una nueva frontera de crecimiento.

Tanto las automotrices como las tecnológicas utilizaron la feria CES esta semana para mostrar su determinación de volver realidad la visión de autos convertidos en máquinas de ingresos conectadas.

Los gigantes de la computación en nube Amazon.com Inc y Microsoft Corp estuvieron en la vanguardia, buscando gestionar el torrente de datos que irá y saldrá de los vehículos conectados.

El giro ocurre en momentos en que las automotrices globales buscan nuevas fuentes de ingresos ante una desaceleración de las ventas y crecientes costos para cumplir normas de emisiones más estrictas que amenazan sus márgenes de utilidades.

Las acciones de automotoras como Ford Motor Co y General Motors Co tuvieron un desempeño muy inferior al del resto de los índices del mercado en 2019. El contraste es Tesla Inc, cuya capitalización de mercado superó el miércoles por primera vez los valores combinados de Ford y GM.

Tesla fue pionera en el modelo de cobrar por actualizaciones inalámbricas y ahora pide 6.000 dólares a sus clientes para activar la opción de conducción autónoma total.

El sedán M-Byte de la automotriz china Byton tiene una pantalla de 48 pulgadas como tablero, así como una pantalla en el volante y una tableta digital para los pasajeros. Cuando está estacionado, el automóvil puede ser usado como oficina al habilitar las llamadas de videoconferecia o como un cine.

BMW mostró en su puesto en la CES el concepto de su futura cabina, con amplios asientos reclinables y un parabrisas con realidad aumentada que incluye información sobre el camino.

Las tecnológicas y proveedores quieren acelerar la transformación de los vehículos en máquinas con paquetes de suscripción al ayudar a las automotrices a resolver los problemas de sus procesadores, que hacen difícil o imposible actualizar de forma inalámbrica a la mayoría de los autos actuales.