Ambas partes logran finalmente concretar un tratado de seguridad bilateral que ahora debe ser aprobado por la Loya Jirga y luego por el parlamento.
El secretario de Estado, John Kerry, anunció que EE.UU y Afganistán llegaron a un acuerdo sobre el texto final del pacto bilateral de seguridad que determinará la presencia de tropas estadounidenses en ese país después del año 2014.
El acuerdo fue negociado con funcionarios estadounidenses por el presidente Hamid Karzai, pero el gran concejo integrado por líderes tribales y notables afganos, la Loya Jirga, que se reunirá tres días a partir del jueves, deberá aprobarlo antes de que sea sometido a votación en el parlamento.
Un punto de gran controversia que tuvo trabado el tratado fue el concerniente a si EE.UU. aceptaba dar garantías de que tropas estadounidenses solo entrarían a hogares afganos en circunstancias “excepcionales” para salvar vidas.
La víspera el portavoz de la presidencia afgana, Aimal Faizi, dijo que ambas partes habían acordado autorizar redadas dentro de viviendas si el presidente Barack Obama escribía una carta admitiendo errores cometidos por tropas estadounidenses en Afganistán. Pero según Kerry, Karzai no pidió a EE.UU. disculparse por bajas civiles.
El tratado es visto como un documento crucial para que perdure la paz en el país, donde de acuerdo con Naciones Unidas la actividad de los talibanes ha alcanzado niveles de violencia no vistos desde 2010.
El acuerdo fue negociado con funcionarios estadounidenses por el presidente Hamid Karzai, pero el gran concejo integrado por líderes tribales y notables afganos, la Loya Jirga, que se reunirá tres días a partir del jueves, deberá aprobarlo antes de que sea sometido a votación en el parlamento.
Un punto de gran controversia que tuvo trabado el tratado fue el concerniente a si EE.UU. aceptaba dar garantías de que tropas estadounidenses solo entrarían a hogares afganos en circunstancias “excepcionales” para salvar vidas.
La víspera el portavoz de la presidencia afgana, Aimal Faizi, dijo que ambas partes habían acordado autorizar redadas dentro de viviendas si el presidente Barack Obama escribía una carta admitiendo errores cometidos por tropas estadounidenses en Afganistán. Pero según Kerry, Karzai no pidió a EE.UU. disculparse por bajas civiles.
El tratado es visto como un documento crucial para que perdure la paz en el país, donde de acuerdo con Naciones Unidas la actividad de los talibanes ha alcanzado niveles de violencia no vistos desde 2010.