El vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, se reunió con líderes de la Comunidad del Caribe en Trinidad y Tobago, segundo país que visita en su gira por el continente.
La meta de Estados Unidos no sólo es crecer sino que junto con él lo hagan también las naciones de la Comunidad del Caribe (CARICOM), dijo este martes en Trinidad y Tobago el vicepresidente estadounidense, Joe Biden.
Biden hizo declaraciones a la prensa en Port Spain junto con la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, y el mandatario de Haití, Michel Martelly, presidente en funciones del CARICOM.
El vicepresidente dijo que EE.UU. está interesado en interrelacionarse más con la región no sólo en el orden comercial y de inversiones.
“Seguiremos invirtiendo con ustedes en educación e innovaciones—señaló—, para mejorar el acceso y la excelencia educativa”.
Para “hacer más de lo que estamos haciendo ahora” precisó que Washington está conectando a hombres de negocios estadounidenses con empresarios caribeños.
Dijo además que había discutido con líderes de la región la necesidad de bajar los costos de la energía. “Sabemos que muchos de sus países pagan tres veces más por la energía que EE.UU.”, indicó.
Luego dio a conocer que la semana pasada EE.UU. y Trinidad y Tobago lanzaron un acuerdo de investigaciones energéticas.
También dijo haber discutido sobre seguridad ciudadana y acerca del peligro de que el tráfico de drogas hacia EE.UU., que actualmente fluye mayormente por Centroamérica, se incremente de nuevo a través del Caribe "en mayor escala que la actual".
Biden enfatizó que los nexos de Washington y el CARICOM van más allá de las relaciones entre gobiernos puesto que 3,6 millones de caribeños tienen por hogar a EE.UU. y envían en remesas a familiares en sus países de origen más de $8 mil millones de dólares al año.
En su gira por tres países del continente, Biden ya estuvo en Colombia, donde se reunió con el mandatario de ese país, Juan Manuel Santos. Este mismo martes el vicepresidente de EE.UU. viaja a Brasil.
Biden hizo declaraciones a la prensa en Port Spain junto con la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, y el mandatario de Haití, Michel Martelly, presidente en funciones del CARICOM.
El vicepresidente dijo que EE.UU. está interesado en interrelacionarse más con la región no sólo en el orden comercial y de inversiones.
“Seguiremos invirtiendo con ustedes en educación e innovaciones—señaló—, para mejorar el acceso y la excelencia educativa”.
Para “hacer más de lo que estamos haciendo ahora” precisó que Washington está conectando a hombres de negocios estadounidenses con empresarios caribeños.
Dijo además que había discutido con líderes de la región la necesidad de bajar los costos de la energía. “Sabemos que muchos de sus países pagan tres veces más por la energía que EE.UU.”, indicó.
Luego dio a conocer que la semana pasada EE.UU. y Trinidad y Tobago lanzaron un acuerdo de investigaciones energéticas.
También dijo haber discutido sobre seguridad ciudadana y acerca del peligro de que el tráfico de drogas hacia EE.UU., que actualmente fluye mayormente por Centroamérica, se incremente de nuevo a través del Caribe "en mayor escala que la actual".
Biden enfatizó que los nexos de Washington y el CARICOM van más allá de las relaciones entre gobiernos puesto que 3,6 millones de caribeños tienen por hogar a EE.UU. y envían en remesas a familiares en sus países de origen más de $8 mil millones de dólares al año.
En su gira por tres países del continente, Biden ya estuvo en Colombia, donde se reunió con el mandatario de ese país, Juan Manuel Santos. Este mismo martes el vicepresidente de EE.UU. viaja a Brasil.