Kenneth Bae era parte de un grupo de turistas cuando fue detenido en noviembre pasado en la ciudad de Rajin. Amigos suyos dicen que realizaba labores humanitarias.
El régimen de Corea del Norte planea llevar a juicio a un ciudadano estadounidense detenido en ese país el año pasado sin detallar los delitos de los que se le acusa.
Kenneth Bae, de 44 años, nacido en Corea del Norte pero naturalizado estadounidense, formaba parte de un grupo de cinco turistas cuando fue detenido por la policía el 3 de noviembre último en la ciudad portuaria de Rajin, en el noreste del país.
Según informó la agencia oficial de noticias en Pyongyang, “en el proceso de investigación, (el detenido) admitió haber cometido delitos para derrocar con hostilidad a la República Popular Democrática de Corea”.
La fuente señaló que “sus delitos fueron probados por evidencias” y que muy pronto Bae encarará juicio ante la Corte Suprema.
Amigos y compañeros de trabajo del detenido aseguran que Bae es un devoto cristiano residente en el estado de Washington pero radicado en la ciudad china de Dalian, fronteriza con Corea del Norte, quien viajaba con frecuencia a este país para dar ayuda humanitaria a huérfanos.
El anuncio del juicio complica aún más las relaciones entre Washington y Pyongyang en momentos de gran tensión en la Península debido a las amenazas militares proferidas por el régimen norcoreano contra EE.UU. y Corea del Sur.
Kenneth Bae, de 44 años, nacido en Corea del Norte pero naturalizado estadounidense, formaba parte de un grupo de cinco turistas cuando fue detenido por la policía el 3 de noviembre último en la ciudad portuaria de Rajin, en el noreste del país.
Según informó la agencia oficial de noticias en Pyongyang, “en el proceso de investigación, (el detenido) admitió haber cometido delitos para derrocar con hostilidad a la República Popular Democrática de Corea”.
La fuente señaló que “sus delitos fueron probados por evidencias” y que muy pronto Bae encarará juicio ante la Corte Suprema.
Amigos y compañeros de trabajo del detenido aseguran que Bae es un devoto cristiano residente en el estado de Washington pero radicado en la ciudad china de Dalian, fronteriza con Corea del Norte, quien viajaba con frecuencia a este país para dar ayuda humanitaria a huérfanos.
El anuncio del juicio complica aún más las relaciones entre Washington y Pyongyang en momentos de gran tensión en la Península debido a las amenazas militares proferidas por el régimen norcoreano contra EE.UU. y Corea del Sur.