Entre los delegados demócratas que asisten al evento en el que el presidente Barack Obama será nominado en busca de la reelección, este año hay un número récord de hispanos.
El Partido Republicano reunió en su convención de la semana pasada en Tampa a varios políticos hispanos jóvenes, pero los demócratas ahora en Charlotte, Carolina del Norte, no piensan hacer menos.
Líderes demócratas se han encargado de subrayar que aún cuando el partido no tenga el mismo número de gobernadores hispanos que los republicanos, en sus filas hay más miembros de esta comunidad y de hecho son unos 800 los que asisten a la Convención, una cantidad récord.
De acuerdo con la secretaria del Comité Nacional Demócrata (CND), Alice Germond, este año participan un centenar más de hispanos que en la de 2008.
Entre ellos despuntan tres estrellas: Julián Castro, alcalde de San Antonio (Texas) a cargo del discurso principal de apertura del evento; Katherine Archuleta, la primera latina en fungir como directora política de una campaña presidencial demócrata, y Alejandra Salinas, presidenta del Colegio de Demócratas de EE.UU.
Según dijo a la prensa Debbie Wasserman Schultz, presidenta del Comité Nacional Demócrata, “Julián Castro es una de las estrellas nacientes de nuestro Partido, y creo que va a electrizar a la audiencia el martes en la noche”.
A veces confundido con su hermano gemelo Joaquín, un fuerte favorito a convertirse en congresista en las próximas elecciones, el alcalde de San Antonio, con 37 años de edad, ha sido mencionado en círculos del partido como futuro gobernador de Texas e incluso como potencial candidato presidencial.
La selección de Julián Castro como orador principal de la apertura del evento demuestra en qué medida los demócratas están interesados en consolidar el apoyo entre los votantes hispanos.
Poco antes de su discurso, Julián Castro dijo sentirse honrado en “tener la oportunidad de dirigirme a la nación esta noche. Estoy ansioso y un poco nervioso, por supuesto”.
También puntualizó el hecho de que la comunidad hispana no sólo es importante desde el punto de vista electoral sino para el propio éxito del país.”El destino de la comunidad hispana está ligado al éxito de Estados Unidos”, dijo.
Aunque según los sondeos, los hispanos siguen respaldando mayoritariamente a Obama su entusiasmo es ahora menor que en los comicios del 2008, y los demócratas confían en que el alcalde de San Antonio pueda ayudarlos en ese empeño.
Líderes demócratas sostienen que las políticas económica, de salud, educación y especialmente inmigración han favorecido marcadamente a los hispanos, en especial la directiva presidencial de junio pasado que detuvo las deportaciones de jóvenes indocumentados.
También ponen de relieve que aunque el candidato republicano, Mitt Romney, no ha declarado si anulará esa medida, sí ha dicho que vetaría el denominado Dream Act, que daría estatus legal permanente a cientos de miles de jóvenes indocumentados si cursan estudios universitarios o se alistan en las fuerzas armadas.
Líderes demócratas se han encargado de subrayar que aún cuando el partido no tenga el mismo número de gobernadores hispanos que los republicanos, en sus filas hay más miembros de esta comunidad y de hecho son unos 800 los que asisten a la Convención, una cantidad récord.
De acuerdo con la secretaria del Comité Nacional Demócrata (CND), Alice Germond, este año participan un centenar más de hispanos que en la de 2008.
Entre ellos despuntan tres estrellas: Julián Castro, alcalde de San Antonio (Texas) a cargo del discurso principal de apertura del evento; Katherine Archuleta, la primera latina en fungir como directora política de una campaña presidencial demócrata, y Alejandra Salinas, presidenta del Colegio de Demócratas de EE.UU.
Según dijo a la prensa Debbie Wasserman Schultz, presidenta del Comité Nacional Demócrata, “Julián Castro es una de las estrellas nacientes de nuestro Partido, y creo que va a electrizar a la audiencia el martes en la noche”.
A veces confundido con su hermano gemelo Joaquín, un fuerte favorito a convertirse en congresista en las próximas elecciones, el alcalde de San Antonio, con 37 años de edad, ha sido mencionado en círculos del partido como futuro gobernador de Texas e incluso como potencial candidato presidencial.
La selección de Julián Castro como orador principal de la apertura del evento demuestra en qué medida los demócratas están interesados en consolidar el apoyo entre los votantes hispanos.
Poco antes de su discurso, Julián Castro dijo sentirse honrado en “tener la oportunidad de dirigirme a la nación esta noche. Estoy ansioso y un poco nervioso, por supuesto”.
También puntualizó el hecho de que la comunidad hispana no sólo es importante desde el punto de vista electoral sino para el propio éxito del país.”El destino de la comunidad hispana está ligado al éxito de Estados Unidos”, dijo.
Aunque según los sondeos, los hispanos siguen respaldando mayoritariamente a Obama su entusiasmo es ahora menor que en los comicios del 2008, y los demócratas confían en que el alcalde de San Antonio pueda ayudarlos en ese empeño.
Líderes demócratas sostienen que las políticas económica, de salud, educación y especialmente inmigración han favorecido marcadamente a los hispanos, en especial la directiva presidencial de junio pasado que detuvo las deportaciones de jóvenes indocumentados.
También ponen de relieve que aunque el candidato republicano, Mitt Romney, no ha declarado si anulará esa medida, sí ha dicho que vetaría el denominado Dream Act, que daría estatus legal permanente a cientos de miles de jóvenes indocumentados si cursan estudios universitarios o se alistan en las fuerzas armadas.