Ejército ucraniano retrocede tras perder Avdiivka

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Un revés sufrió el ejército ucraniano tras perder la ciudad de Avdiivka. Las tropas se vieron obligadas a retroceder mientras esperan la ayuda prometida por Estados Unidos, pero trabada en el Congreso. Jaime Moreno con el reporte.

Sin suficientes armas ni hombres, el ejército ucraniano no tuvo una opción diferente a la de abandonar la ciudad de Avdiivka. A varios kilómetros de distancia construyen una nueva línea de trincheras para resistir a la contraofensiva rusa.

“Sobre nuestra retirada, desde el punto de vista militar es una maniobra muy difícil de realizar. Nos duele dejar atrás nuestras ciudades en ruinas que siguen siendo ucranianas, las fortificaciones que habíamos construido en las que luchamos contra el enemigo. Pero eso no significa que hayamos perdido la guerra", dijo el mayor Rodion Kudriashov, subcomandante de la Tercera Brigada de Asalto del ejército de Ucrania.

Tras la retirada de las tropas ucranianas en Avdiivka, el ejército ruso rápidamente declaró que había tomado el control de la ciudad. El ministerio de Defensa de ese país reveló un video de una ciudad en ruinas tras meses de enfrentamientos.

“Ellos, (los soldados ucranianos) corrieron detrás del ferrocarril. Nuestros vecinos y camaradas asaltaban el flanco derecho y de esta manera los empujábamos y cercábamos”, dijo un soldado Ruso que no fue identificado en el video.

La toma de Avdiivka es la mayor victoria militar de Rusia desde hace 9 meses, cuando capturó la ciudad de Bakhmut.

"Ahora la situación es extremadamente difícil en varias partes de la línea del frente, exactamente donde las tropas rusas han concentrado el máximo de reservas. Están aprovechando los retrasos en la ayuda a Ucrania, y este es un asunto muy delicado. La escasez de artillería, la necesidad de la línea del frente defensa aérea y para un mayor alcance de nuestras armas", expresó el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy.

El Senado estadounidense ya aprobó el millonario paquete de ayuda militar para Ucrania, impulsado por la Administración Biden, pero en la cámara baja enfrenta la resistencia del ala más conservadora del Partido Republicano, que se opone a girarle más fondos a Ucrania.