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En un mundo cada vez más digital, un boliviano decidió recuperar la historia y el arte de la fotografía antigua con cámaras centenarias obtenidas en diferentes partes del mundo. Fabiola Chambi lo visitó y nos cuenta su historia.
((TEXTO))
La pasión de Diego Echevers está atrapada en el tiempo y en un estudio en su casa donde tiene cámaras de más de 120 años de antigüedad en perfecto estado, con las cuales crea fotografías que, él considera, son “poesía”.
((Diego Echevers, Fotógrafo e investigador 0:31 – 0:44))
“Esta fotografía está hecha con tiempo, está hecha con las manos, está hecha con el cuerpo y creo que eso es algo que en el mundo de la digitalización se ha perdido de vista”.
Esta forma de retratar la historia se da bajo el concepto de “fotografía imperfecta” o “antifotografía”…
((Diego Echevers, Fotógrafo e investigador 0:31 – 0:44))
“Es imperfecta porque está hecha con las manos y porque al estar hecha bajo esta idea no existen dos iguales, es más hay riesgos (…) pueden fallar y de hecho muchas de estas fallas le dan un carácter único al resultado”.
Cada una de sus cámaras tiene nombre y una historia. Diego dice que son viajeras porque han recorrido miles de kilómetros hasta llegar a sus manos, como Candelaria, su favorita, que data de 1905. Fue hecha en Suiza y llegó a Bolivia desde Valparaíso, Chile.
O Luz, una cámara de riel que fue adquirida en una venta de garaje en Estados Unidos y data de los años 80.
((Diego Echevers, Fotógrafo e investigador 0:31 – 0:44))
“Hacemos fotografía a la antigua, mi interés es aprender del pasado, darle vida y mantener el saber y la memoria vivos”.
Su trabajo se vende sobre todo en Europa a un mercado de coleccionistas a través de la Galería de Arte Albumen Print y llega a países como Alemania, Dinamarca, Bélgica y Holanda.
Pero el talento de Diego va más allá porque creó su propia cámara para comercializarla a un costo accesible de 50 dólares. Está hecha de roble y trabajada cuidadosamente a mano. Su objetivo es que más apasionados de la fotografía comprendan el valor de lo imperfecto.
((FABIOLA CHAMBI, VOZ DE AMÉRICA, BOLIVIA))