El gobierno del presidente salvadoreño Nayib Bukele pidió el martes al Congreso que apruebe otra prórroga del estado de excepción para continuar con la que ha denominado guerra contra las pandillas, a las que responsabiliza de la mayoría de los crímenes que se cometen en el país.
“Esta guerra si bien es cierto la vamos ganando, hace falta trabajo todavía por realizar”, dijo el ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, al presentar la solicitud para prorrogar, por otros 30 días, el régimen de excepción al Congreso del país.
“La misión que nos están dando los salvadoreños es clara, erradicar a estos terroristas del territorio salvadoreño”, afirmó.
Previo a las declaraciones de Villatoro el presidente del Congreso y principal aliado de Bukele, Ernesto Castro, ya había confirmado, a través de su cuenta de Twitter, que daría su voto para aprobar la medida.
"Mi voto a mano alzada para aprobar la prolongación del régimen de excepción", escribió.
Organizaciones defensoras de los derechos humanos han denunciado reiteradas violaciones, entre ellas detenciones arbitrarias y violaciones al debido proceso y han pedido al gobierno poner fin a la medida y revertir reformas al Código Penal que aprobó el Congreso, argumentando que tales medidas atentan contra los derechos humanos de la población.
La organización defensora de Derechos Humanos, Cristosal, citó el martes en Twitter que desde que se implementó la media ha "recibido 1.993 casos de personas que han denunciado violaciones a derechos humanos durante el régimen de excepción".
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Tres años de gobierno de Nayib Bukele
Persiste el desplazamiento forzado
Cristosal, además denunció que “el régimen (de excepción) no ha parado el desplazamiento forzado interno por violencia de pandillas”.
Rina Montti, directora de Investigación de Derechos Humanos de la organización Montti dijo que desde que inició el régimen de excepción el 27 de marzo han documentado 85 personas en situación de desplazamiento forzado interno y que “más del 80% están reportando que el detonante principal fue cometido por miembros de las pandillas”, lo que demuestra que parte del accionar de estos grupos sigue activo.
De éstos, 50 casos son de mujeres y 35 hombres y en el desglose por edades 34 son menores.
*Con información de AP
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