El enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, dijo a la Voz de América que el gobierno en disputa de Nicolás Maduro requiere más presión internacional y que se pueden esperar más sanciones de parte del gobierno de Donald Trump.
Abrams, que ha jugado un rol protagónico en la política estadounidense para ejercer presión sobre Maduro y sus aliados, se reunió el lunes con el Grupo de Lima, la iniciativa diplomática que aboga por una salida pacífica a la crisis venezolana.
"Lo que acabo de decir en el Grupo de Lima es que en nuestra opinión, necesitamos más presión aún, más presión, más sanciones y ustedes verán más sanciones por (parte de) Estados Unidos", afirmó Abrams a la VOA.
El diplomático estadounidense dijo que "claramente el objetivo es cooperar sobre temas de presión diplomática, presión económica", dijo y aludió a ejemplos como la política desarrollada por Brasil y Canadá en ese sentido respecto a Venezuela.
Your browser doesn’t support HTML5
También lea La Asamblea General de la ONU: minuto a minuto
Abrams: "No estamos hablando de invasión"
"Queremos coordinar nuestros pasos hacia adelante", dijo. "No estamos hablando de una invasión militar", aclaró.
"Todos queremos un cambio serio para lograr cambios en la situación venezolana", dijo Abrams. "Hemos visto ya (...) que el régimen no quiere dialogar ni negociar seriamente, no quieren en verdad un cambio político en Venezuela".
Dijo que Maduro ha utilizado los intentos de diálogo para dividir a la oposición y a la comunidad internacional y para postegar los cambios.
Estados Unidos y más de 50 naciones respaldan al gobierno encargado que lidera Juan Guaidó en Venezuela.
También lea Venezuela: Dos agendas en pugna en la mira de la 74 Asamblea General de la ONU"Nuevo capítulo de presión"
El comisionado de Relaciones Exteriores del gobierno encargado de Venezuela, Julio Borges, dijo el lunes que tras el fin de la negociación en Barbados con Maduro a instancias de Noruega, cree que "Estados Unidos y Europa van a incrementar la presión".
"Tiene que abrirse ahora un nuevo capítulo de presión, sobre todo de países europeos, de la región, para lograr que con esa presión, o se termine de quebrar la dictadura o que se les obligue a un desenlace democrático", dijo Borges a reporteros en la ONU.