EN FOTOS Libertad para secuestrados por Hamás piden los marchantes que llegaron este sábado a Jerusalén
Familiares de israelíes en poder de Hamás participan en una marcha por el regreso de sus seres queridos, que partió el pasado martes desde Tel Aviv y que concluyó hoy en los alrededores de la oficina del Primer Ministro Benjamín Netanyahu, en Jerusalén.
Unas 35 mil personas participan en una marcha por el regreso de los rehenes en poder de Hamás que partió el pasado martes desde Tel Aviv y que concluyó hoy en los alrededores de la oficina del Primer Ministro Benjamín Netanyahu, en Jerusalén.
Una mujer con las manos atadas y la boca amordazada participa en la marcha por el regreso de los rehenes en poder de Hamás que hoy concluyó ne Jerusalén, muy cerca de las oficinas del Primer Ministro, Benjamín Netanyahu.
Si hay que devolver a los miles de presos palestinos que tenemos aquí (en Israel), que los devuelvan, dice una de las personas que participan en la marcha.
En el primer mes de la guerra, gracias a la mediación de Qatar y de EEUU, Hamás liberó a hasta cuatro rehenes: primero una madre y una hija estadounidenses; y luego a dos ancianas israelíes. Pero las negociaciones llevan semanas atascadas, sin resultados tangibles.
Miles de personas se congregaron frente a la Oficina del Primer Ministro en Jerusalén, para reclamar el retorno inmediato de los alrededor de 240 rehenes que Hamás mantiene cautivos en la Franja de Gaza.
Miles de los marchantes llegaron a la ciudad después de una caminata de varios días por la principal autopista de Israel que partió el pasado martes desde Tel Aviv.
La marcha, que salió el pasado martes desde Tel Aviv, concluyó este sábado en los alrededores de la oficina del Primer Ministro Benjamín Netanyahu, en Jerusalén.
Los familiares de israelíes en poder de Hamás participaron en la marcha para pedir por el regreso de sus seres queridos.
Miles de personas hicieron parte de la caminata que por varios días recorrió ciudades hasta llegar a Jerusalén este sábado.
La oficina, en Jesuralén, del primer ministro de Israel fue el lugar de destino de los manifestantes que piden la libertad de sus seres queridos en poder de Hamás.