El Cuerpo de Infantería de Marina del Ejército estadounidense informó que se han encontrado rastros de ADN de los marines que murieron cuando dos helicópteros militares se estrellaron frente a la costa de Hawái el mes pasado.
El incidente en el que perecieron 12 marines, es uno de los peores que el Ejército estadounidense ha sufrido en los ejercicios de entrenamiento en la última década.
Los rastros de ADN fueron encontrados durante las misiones de búsqueda y rescate que terminaron el 19 de enero, y las familias de los marines fueron informadas, indicó un comunicado oficial, el cual aclara que: "Ninguno de los 12 marines que participaba en el malogrado ejercicio del 14 de enero ha sido recuperado".
Los militares desaparecidos, cuyas edades fluctúan entre los 21 y 41 años, viajaban en dos helicópteros CH'53E, en una misión de entrenamiento de rutina, frente a la isla de Oahu.
Oficiales militares han dicho que la causa del accidente continúa siendo investigada, así como la posibilidad de que los dos helicópteros hayan chocado.