La lista de elementos para producir ‘energías limpias’ en Estados Unidos, incluye productos cuyas patentes están en Japón y otros países.
En busca de reforzar la política de reducir el consumo de petróleo, Estados Unidos trabaja en un proyecto alternativo que incluye el uso de productos considerados como ‘raros’ para producir energía eólica, a partir de fuentes limpias como el sol y el viento.
Elementos como el disprosio, neodimio, terbio, europio, itrio, cerio, indio, lantano y el telurio, son algunos de los productos considerados como clave para la generación de energía, sin embargo su producción es limitada a nivel mundial y está concentrada en China.
Datos preliminares indican que en el 2011 la producción de estos elementos sumó cerca de 120 mil toneladas a nivel mundial, con un valor cercano a los 3.000 millones de dólares, pero la falta de información sobre la producción y comercialización de los productos representa un obstáculo para conocer su disponibilidad en el mercado, dado que no figuran en las bolsas de metales del mundo.
Aunque con esta iniciativa, Estados Unidos hace una apuesta por generar las llamadas ‘energías limpias’, el país no cuenta con personal especializado en la manipulación de estas materias primas, ya que las patentes están en poder de China, Japón y Alemania.
Ante la situación, el plan energético estadounidense prevé incrementar la producción de la mina de Mountain Pass, en California, de 5 a 8 mil toneladas, antes del 2015, e incluye la creación de un centro de investigación interagencias.
Los inusuales elementos, son clave para la fabricación de teléfonos celulares, baterías y magnetos para carros eléctricos, iluminación con luz fluorescente y celdas fotovoltaicas de los paneles solares, entre otros productos.
Elementos como el disprosio, neodimio, terbio, europio, itrio, cerio, indio, lantano y el telurio, son algunos de los productos considerados como clave para la generación de energía, sin embargo su producción es limitada a nivel mundial y está concentrada en China.
Datos preliminares indican que en el 2011 la producción de estos elementos sumó cerca de 120 mil toneladas a nivel mundial, con un valor cercano a los 3.000 millones de dólares, pero la falta de información sobre la producción y comercialización de los productos representa un obstáculo para conocer su disponibilidad en el mercado, dado que no figuran en las bolsas de metales del mundo.
Aunque con esta iniciativa, Estados Unidos hace una apuesta por generar las llamadas ‘energías limpias’, el país no cuenta con personal especializado en la manipulación de estas materias primas, ya que las patentes están en poder de China, Japón y Alemania.
Ante la situación, el plan energético estadounidense prevé incrementar la producción de la mina de Mountain Pass, en California, de 5 a 8 mil toneladas, antes del 2015, e incluye la creación de un centro de investigación interagencias.
Los inusuales elementos, son clave para la fabricación de teléfonos celulares, baterías y magnetos para carros eléctricos, iluminación con luz fluorescente y celdas fotovoltaicas de los paneles solares, entre otros productos.