Una delegación de la empresa española Navantia viajó a Venezuela para acordar nuevos contratos con el gobierno del país latinoamericano. El ministro de Defensa calificó a Chávez como un “gran amigo” de su país
España podría firmar, en los próximos días, nuevos contratos con el gobierno de Venezuela relacionados con la venta de material y equipamiento militar a través de la empresa Navantia, que ha enviado una delegación con este fin a Caracas.
El gobierno español, que en 2005 firmó acuerdos similares con el gobierno Chávez, ha dado el visto bueno a esta operación a través del ministro de Defensa, Pedro Morenés, que en una sesión de control del Congreso se ha mostrado conforme con el comercio de armamento con Venezuela, y ha considerado al presidente venezolano como un “gran amigo” de España.
Navantia, por su parte, no ha hecho ninguna declaración. Tras los acuerdos que firmó durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, la empresa vendió a la armada venezolana siete patrulleros por valor de 1.200 millones de euros, una cantidad que se acerca a los 1.500 millones de dólares.
Mensaje para Estados Unidos
Durante su intervención en el Congreso, Morenés ha comunicado que España sigue teniendo el veto de EE.UU. en la venta de productos nacionales que contengan componentes procedentes del país norteamericano.
Washington impidió, durante los acuerdos de 2005, que se vendiesen a Venezuela doce aviones de transporte construidos por EADS-CASA por esta misma razón.
“Venezuela no es precisamente muy amigo de los Estados Unidos, y su presidente (Chávez), por cierto, insulta un día sí y otro no al presidente de EE.UU., que también es un gran amigo nuestro”, aclaró el ministro.
Morenés defendió el ejercicio de la soberanía de España a la hora de cerrar acuerdos comerciales con otros países y recalcó la necesidad de respetar la soberanía de otros países “si queremos que se respete la nuestra”.
“El gobierno de España busca la independencia de criterio a la hora de aliarse con una serie de países que defienden unos ppios que nosotros compartimos y que la mayoría de los españoles comparten”, añadió.
Asimismo, puntualizó que si Navantia hace tratos con el gobierno Chávez esto podría fomentar el incremento de puestos de trabajo en la industria militar.
El gobierno español, que en 2005 firmó acuerdos similares con el gobierno Chávez, ha dado el visto bueno a esta operación a través del ministro de Defensa, Pedro Morenés, que en una sesión de control del Congreso se ha mostrado conforme con el comercio de armamento con Venezuela, y ha considerado al presidente venezolano como un “gran amigo” de España.
Navantia, por su parte, no ha hecho ninguna declaración. Tras los acuerdos que firmó durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, la empresa vendió a la armada venezolana siete patrulleros por valor de 1.200 millones de euros, una cantidad que se acerca a los 1.500 millones de dólares.
Mensaje para Estados Unidos
Durante su intervención en el Congreso, Morenés ha comunicado que España sigue teniendo el veto de EE.UU. en la venta de productos nacionales que contengan componentes procedentes del país norteamericano.
Washington impidió, durante los acuerdos de 2005, que se vendiesen a Venezuela doce aviones de transporte construidos por EADS-CASA por esta misma razón.
“Venezuela no es precisamente muy amigo de los Estados Unidos, y su presidente (Chávez), por cierto, insulta un día sí y otro no al presidente de EE.UU., que también es un gran amigo nuestro”, aclaró el ministro.
Morenés defendió el ejercicio de la soberanía de España a la hora de cerrar acuerdos comerciales con otros países y recalcó la necesidad de respetar la soberanía de otros países “si queremos que se respete la nuestra”.
“El gobierno de España busca la independencia de criterio a la hora de aliarse con una serie de países que defienden unos ppios que nosotros compartimos y que la mayoría de los españoles comparten”, añadió.
Asimismo, puntualizó que si Navantia hace tratos con el gobierno Chávez esto podría fomentar el incremento de puestos de trabajo en la industria militar.