El presidente Barack Obama regresa el martes a Estados Unidos tras su viaje a África para confrontar un Congreso agitado por el acuerdo nuclear con Irán, que ha recibido la aprobación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El reloj continúa su marcha hacia los 60 días que tiene el Congreso para revisar el acuerdo internacional con Teherán. El senador republicano y candidato a la nominación presidencial Lindsey Graham es uno de los acérrimos opositores del acuerdo.
“Les hemos dado una bomba, un misil para enviarla y dinero para pagar por ella. Éste es un terrible acuerdo” indicó Graham.
El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Bob Corker, tuvo duras palabras para el secretario de Estado John Kerry.
“Lo que creo que usted hizo en realidad en estas negociaciones es codificar un camino perfectamente alineado para que Irán obtenga un arma nuclear solo cumpliendo este acuerdo” dijo Corker.
Kerry insiste en que solo el pacto logrado en Viena puede detener la macha de Irán hacia un arsenal nuclear.
“Irán ya ha conquistado el ciclo de combustible nuclear. Cuando comenzamos nuestras negociaciones, Irán tenía suficiente material fisible para 10 o 12 bombas. Ellos tenían 19.000 centrífugas” indicó el secretario de Estado Kerry.
Muchos senadores demócratas aún no han anunciado su posición con respecto al pacto nuclear con Irán.
Encuestas muestran una mayoría de apoyo al pacto, pero amplio escepticismo de que impida que Irán se mantenga como un estado libre de armas nucleares