Envían carta en la que urgen a los republicanos por el apoyo de una reforma migratoria integral para los más de 11 millones de indocumentados.
Más de 100 prominentes donantes del partido republicano enviaron una carta exigiendo a los legisladores de su propio partido que tomen acción y solucionen el resquejabrajado sistema de inmigración estadounidense.
La iniciativa está liderada por Carlos Gutiérrez, ex secretario de Comercio en el gobierno del presidente George W. Bush y fundador de super PAC (Comité de Acción Política) , Republicanos por la Reforma Migratoria, quien expresó que este es solo el inicio de una intensa campaña de cabildeo.
La idea, según Gutiérrez es “bombardear” a los legisladores republicanos con cartas y llamadas telefónicas a sus oficinas durante el mes de vacaciones que van tener en agosto en sus respectivos distritos.
“De esta manera los republicanos que apoyamos la reforma, y yo creo que hay muchos, necesitamos hacer que nuestra voz sea escuchada en agosto”, agregó Gutiérrez.
En la carta, los donantes, muchos de ellos importantes hombres de negocios como Karl Rove, subjefe del gabinete de la Casa Blanca de Bush; Tom Stemberg, uno de los fundadores de Staples; el exvicepresidente Dan Quayle, entre otros, estipulan tres puntos esenciales dentro de una reforma integral.
Ellos consideran primero que nada una reforma que garantice la seguridad en las fronteras, que dé garantías a los empleadores que está contratando personal legalmente acreditado para trabajar en EE.UU. y que se tome control de la población indocumentada dándole un camino a la ciudadanía, pero sin que tengan ventaja sobre aquellos que han cumplido con la ley y están en una larga lista de espera.
Según expresa la carta los inmigrantes y los republicanos comparten los mismos valores y constituyen partes claves dentro de nuestra economía y la ayudan a crecer.
“Estos son asuntos de interés para los republicanos. Los republicanos deben dar la bienvenida a los inmigrantes y se debe ver que realmente lo están haciendo”, dice la carta.
La iniciativa está liderada por Carlos Gutiérrez, ex secretario de Comercio en el gobierno del presidente George W. Bush y fundador de super PAC (Comité de Acción Política) , Republicanos por la Reforma Migratoria, quien expresó que este es solo el inicio de una intensa campaña de cabildeo.
La idea, según Gutiérrez es “bombardear” a los legisladores republicanos con cartas y llamadas telefónicas a sus oficinas durante el mes de vacaciones que van tener en agosto en sus respectivos distritos.
“De esta manera los republicanos que apoyamos la reforma, y yo creo que hay muchos, necesitamos hacer que nuestra voz sea escuchada en agosto”, agregó Gutiérrez.
En la carta, los donantes, muchos de ellos importantes hombres de negocios como Karl Rove, subjefe del gabinete de la Casa Blanca de Bush; Tom Stemberg, uno de los fundadores de Staples; el exvicepresidente Dan Quayle, entre otros, estipulan tres puntos esenciales dentro de una reforma integral.
Ellos consideran primero que nada una reforma que garantice la seguridad en las fronteras, que dé garantías a los empleadores que está contratando personal legalmente acreditado para trabajar en EE.UU. y que se tome control de la población indocumentada dándole un camino a la ciudadanía, pero sin que tengan ventaja sobre aquellos que han cumplido con la ley y están en una larga lista de espera.
Según expresa la carta los inmigrantes y los republicanos comparten los mismos valores y constituyen partes claves dentro de nuestra economía y la ayudan a crecer.
“Estos son asuntos de interés para los republicanos. Los republicanos deben dar la bienvenida a los inmigrantes y se debe ver que realmente lo están haciendo”, dice la carta.