Un juego de fútbol americano y otro de béisbol desviaron la atención de los televidentes del debate del lunes por la noche.
El debate del lunes entre el presidente Barack Obama y su rival republicano Mitt Romney, fue visto por un número de televidentes bastante inferior a los dos previos, debido a que a esa hora se transmitió un partido de fútbol americano y otro de beisbol, que distrajeron bastante a la audiencia.
Las cifras finales de Nielsen mostraron que 59,2 millones de estadounidenses vieron el lunes el tercer debate entre los dos hombres, 8 millones menos que los 67,2 millones de personas que vieron el primero. Unos 65,6 millones de telespectadores siguieron el segundo debate la semana pasada.
El tema del debate, la política exterior, tampoco era el más importante para los estadounidenses, a quienes les preocupa más la economía y la creación de trabajos.
No obstante, el debate fue transmitido por 11 cadenas de cable y televisión, además de otros sitios web como la Voz de América, que lo emitió con traducción simultánea.
El juego de las Grandes Ligas del Béisbol, que definió el pase de los Gigantes de San Francisco a la Serie Mundial, fue visto por 8,1 millones de personas en la cadena FOX, mientras el partido de fútbol americano de lunes por la noche en ESPN, tuvo una audiencia de 10,7 millones de personas, dijo Nielsen.
Pese a que los analistas consideran que los debates de esta campaña, notablemente el primero y el segundo, han estado entre los mejores en la historia, ninguno atrajo la atención de los estadounidenses como el encuentro entre los candidatos a vicepresidentes en 2008, entre la republicana Sarah Palin y el demócrata Joe Biden.
Fue visto por 69,9 millones de personas e igualó el segundo lugar como el segundo debate más visto en la historia de Estados Unidos.
El debate presidencial más visto en la televisión de Estados Unidos fue el encuentro de octubre de 1980 entre Ronald Reagan y Jimmy Carter, que atrajo a 80,6 millones de telespectadores.
Las cifras finales de Nielsen mostraron que 59,2 millones de estadounidenses vieron el lunes el tercer debate entre los dos hombres, 8 millones menos que los 67,2 millones de personas que vieron el primero. Unos 65,6 millones de telespectadores siguieron el segundo debate la semana pasada.
El tema del debate, la política exterior, tampoco era el más importante para los estadounidenses, a quienes les preocupa más la economía y la creación de trabajos.
No obstante, el debate fue transmitido por 11 cadenas de cable y televisión, además de otros sitios web como la Voz de América, que lo emitió con traducción simultánea.
El juego de las Grandes Ligas del Béisbol, que definió el pase de los Gigantes de San Francisco a la Serie Mundial, fue visto por 8,1 millones de personas en la cadena FOX, mientras el partido de fútbol americano de lunes por la noche en ESPN, tuvo una audiencia de 10,7 millones de personas, dijo Nielsen.
Pese a que los analistas consideran que los debates de esta campaña, notablemente el primero y el segundo, han estado entre los mejores en la historia, ninguno atrajo la atención de los estadounidenses como el encuentro entre los candidatos a vicepresidentes en 2008, entre la republicana Sarah Palin y el demócrata Joe Biden.
Fue visto por 69,9 millones de personas e igualó el segundo lugar como el segundo debate más visto en la historia de Estados Unidos.
El debate presidencial más visto en la televisión de Estados Unidos fue el encuentro de octubre de 1980 entre Ronald Reagan y Jimmy Carter, que atrajo a 80,6 millones de telespectadores.