Estados Unidos dice que está “profundamente preocupado” de que Irán ha retornado a prisión a Baquer Namazi, un iraní estadounidense después de liberarlo brevemente para recibir tratamiento médico.
La Casa Blanca dijo que entendía que el exfuncionario de las Naciones Unidas, de 81 años, fue enviado de nuevo a la notoria prisión Evin en contra del claro consejo de sus médicos y del médico examinador del gobierno iraní.
“De la nada ordenaron a mi padre que vuelva de inmediato, es asombroso por decir lo menos. Ha sido una demostración espectacular de crueldad en mi opinión”, dijo Babak Namazi, hijo del encarcelado iraní estadounidense.
El abogado iraní Mahmoud Alizadeh Tabatabei, representa a los detenidos ciudadanos iraníes estadounidenses Siamak Namazi y su padre Baquer.
Namazi está cumpliendo una sentencia de 10 años basado en las alegaciones de Teherán de que espió contra Irán y que cooperó con Estados Unidos. El gobierno estadounidense ha calificado esos cargos como “falsos”.
La administración Trump también ha pedido la liberación de su hijo Siamak Namazi y otros ciudadanos estadounidenses que según dijo están injustamente detenidos en Irán.
Baquer Namazi fue detenido hace dos años, cinco meses después del arresto de su hijo.