El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, nombró el jueves a Susan Rice, exembajadora ante las Naciones Unidas, como directora para el Consejo de Política Doméstica de la Casa Blanca, en el último grupo de futuros miembros del gobierno anunciado por el equipo de transición del demócrata.
Biden también desveló a sus elegidos para secretario de Agricultura, el exgobernador de Iowa Tom Vilsack —quien ocupó el cargo durante el gobierno de Barack Obama—; así como para la secretaria de Vivienda y Desarrollo, la legisladora por Ohio, Marcia Fudge.
Por ultimo, Biden anunció a Denis McDonough, exjefe de gabinete de Obama, como nominado para secretario de Asuntos de Veteranos y a Katherine Tai como representante de Comercio de EE.UU.
“Este dedicado y distinguido grupo de servidores públicos traerá el más alto nivel de experiencia, compasión e integridad para hacer frente y solucionar problemas y expandir las posibilidades de los estadounidenses frente a grandes desafíos”, dijo el presidente electo en un comunicado.
También lea Biden presenta su equipo económico con la mira en la pandemiaBiden presentará oficialmente a los nominados el viernes, según adelantó el equipo de transición en un comunicado.
Los elegidos son un reflejo de la promesa de campaña de Biden de elegir a un gabinete diverso: Rice y Fudge son afroestadounidenses, mientras que Tai es de ascendencia china.
El retorno de Susan Rice
Rice, de 56 años, fue considerada como posible compañera de fórmula de Biden y también como posible secretaria de Estado —cargo que finalmente fue para el diplomático Antony Blinken—, según informaron medios nacionales.
El anuncio de su nombramiento este jueves causó sorpresa, debido a la amplia experiencia de Rice en asuntos de política exterior. Además de representar a Washington ante las Naciones Unidas por cuatro años, fue asesora de seguridad nacional de Obama, el principal cargo para asuntos internacionales en la Casa Blanca.
La nominación de Rice para liderar la política doméstica no necesita ser confirmada por el Senado, evitando así una nueva posible oposición republicana, tal y como ya ocurrió en el pasado, debido a su responsabilidad en el ataque de Bengasi, Libia, en el 2012.
Una vez el nuevo gobierno tome posesión el 20 de enero, Rice será la encargada de coordinar la implementación del plan de Biden para la recuperación económica y laboral en medio de la crisis desencadenada por la pandemia del COVID-19.
Originaria de Washington D.C., Rice también ocupó altos cargos relacionados con política exterior durante el gobierno de Bill Clinton. Tiene un doctorado de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido y un pregrado de la Universidad de Stanford.
Vilsack, de 69 años, repite a la cabeza del Departamento de Agricultura, donde estuvo los dos mandatos del gobierno Obama. Antes del anuncio, la posible nominación del exgobernador generó críticas por parte de grupos progresistas, quienes aseguran que, durante el liderazgo de Vilsack, el departamento discriminó en contra de granjeros que eran parte de minorías étnicas y raciales.
Por su parte, Fudge, de 68 años, pasará a liderar la agencia encargada de las necesidades de vivienda en el país, en un momento crucial, mientras se acerca una crisis de desahucios provocada por la pandemia del COVI-19.
Fudge ha sido representante de la Cámara Baja por el distrito 11 de Ohio durante 12 años. Antes de eso, fue alcaldesa de Warrensville Heights, también en Ohio, su estado natal. Es abogada de la Universidad Estatal de Cleveland.
McDough, de 51 años, tiene amplia experiencia en la Casa Blanca; fue jefe de gabinete de Obama y también vicesecretario de Seguridad Nacional. Sin embargo, no es veterano. Es originario de Minnesota y tiene un máster de la Universidad de Georgetown.
Por ultimo, Tai, de 42 años, liderará la agencia responsable de desarrollar la política de comercio estadounidense. Tiene una amplia experiencia en la Oficina del Representante de Comercio y será la primera asiática-estadounidense en ocupar el puesto.
Tai ha liderado la disputas comerciales de Washington contra China ante la Organización Mundial del Comercio, lo que le da una experiencia clave para pasar a liderar la nueva política comercial, después de la tormentosa guerra comercial liderada por Trump.