La pandemia mundial de coronavirus cerró los estadios a nivel mundial, pero los peloteros siguieron empeñados en dar lo mejor de sí mismo con los aficionados mirándoles desde la sala de sus casas. Por eso el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo hoy que “Necesitamos de los deportes más de lo que pensamos”, al recibir a los Dodgers de Los Ángeles, campeones de la Serie Mundial 2020 de las Grandes Ligas de Béisbol.
Al reseñar el difícil trance que vivió EE. UU. y el mundo con el avance de los casos de COVID-19 y las restricciones impuestas a nivel nacional, Biden señaló que se trata de “uno de los años más desafiantes en la historia de nuestra nación” y se remitió al recuerdo de las familias que habían perdido a sus seres queridos.
El 27 de octubre de 2020, el equipo de los Dodgers se alzó con el cetro tras 32 años sin ganar una serie mundial. Era un sueño acariciado por demasiado tiempo. “Esta es una organización de campeonato mundial porque tienen un equipo lleno de tipos que dieron un paso al frente cuando se les pidió, simplemente dieron un paso al frente”, dijo el mandatario al agradecer varias veces el esfuerzo de los peloteros.
Biden recalcó el sentido cultural y humanista de la actividad deportiva, tanto desde la práctica como de lo que le brinda a la afición al precisar: “Nos une para sanar, para ayudarnos a sentir que las cosas van a estar bien”.
El presidente Joe Biden recibe una camisa de los Dodgers en la bienvenida que les ofreció el 2 de julio en la Casa Blanca, a su derecha el pitcher Clayton Kershaw y a la izquierda el dueño del equipo, Mark Walter.
Por los peloteros habló el serpentinero Clayton Kershaw, quien se ha alzado tres veces con el Premio Cy Young, el galardón que se otorga desde 1956 al mejor pitcher de cada temporada.
“Nuestra esperanza”, dijo el lanzador, “era que pudiéramos brindar un poco de alegría, consuelo y alivio a nuestros fanáticos que estaban pasando por momentos difíciles esta temporada. Ha sido increíble tener a los fanáticos de vuelta en el estadio”.
El mismo Kershaw procedió a la entrega de una camisa del equipo con el número 46 al presidente Biden y una con el número 49 a la vicepresidenta Kamala Harris, regaladas por el propietario del equipo, Mark Walter.
Finalmente, Biden volvió sobre el logro de haber mantenido el espectáculo para la fanaticada, a pesar de la pandemia.
Biden también elogió la organización porque el Dodger Stadium sirvió de centro para pruebas de COVID-19 y campamento para suministrar las vacunas. “Entonces, el Dodger Stadium no solo alberga campeones mundiales”, dijo al recordar que fue un centro de votación para las elecciones presidenciales de noviembre de 2020.
“Así que felicitaciones a todos ustedes y mucha suerte para el resto de la temporada. Que Dios los bendiga a todos”, concluyó el presidente.