Las principales medidas climáticas y de energía limpia están incluidas en el paquete de 1,4 billones de dólares en gastos anuales para financiar al gobierno y 900.000 millones para brindar alivio por el COVID-19, aprobado por el Congreso de Estados Unidos el lunes por la noche.
Se trata de un acuerdo bipartidista sobre un tema que se ha estancado en su mayoría en el Congreso mientras aumentan las temperaturas globales y se acumulan los desastres provocados por el cambio climático.
Los grupos ambientalistas dijeron que la iniciativa es un comienzo, pero que queda mucho por hacer.
La medida proporciona exenciones fiscales a corto plazo para la energía solar y eólica y en el caso de la tecnología para eliminar el dióxido de carbono de las centrales eléctricas y las emisiones industriales, que calienta el planeta, conocido como captura y almacenamiento de carbono.
También lea Cámara Baja de EE.UU. aprueba presupuesto de defensa por mayoría abrumadoraReduce gradualmente el uso de gases de efecto invernadero extremadamente potentes, conocidos como hidrofluorocarbonos (HFC, por sus siglas en inglés) en los sistemas de refrigeración. La investigación y el desarrollo de energías limpias también reciben un impulso de financiación.
En total, en la legislación hay aproximadamente 35.000 millones de dólares de nuevos fondos para tecnología renovable y eficiencia energética , según grupos de defensores.
"En los últimos años, encontramos mucho cinismo para que un proyecto de ley como este realmente se pudiera hacer", dijo el vicepresidente senior de políticas de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, Marty Durbin, en un comunicado. "Pero la aprobación de este proyecto de ley demostrará que hay un terreno común en el que todos los lados del debate pueden unirse", señaló.
Durbin describió el proyecto de ley como "verdaderamente histórico: establece la acción más grande que el Congreso haya tomado para abordar el cambio climático y el primer proyecto de ley de energía en 13 años".
El director de la Campaña por la Democracia de Greenpeace USA, Folabi Olagbaju, lo calificó como "un paso en la dirección correcta, pero no lo suficientemente bueno para enfrentar la magnitud del momento".
También lea John Kerry será enviado especial para cambio climático en la administración BidenEl 2020 está en camino de ser el año más cálido o el segundo más cálido registrado. Los científicos dicen que es necesario que se produzcan recortes drásticos en las emisiones de gases de efecto invernadero en todo el mundo y pronto para evitar un calentamiento global catastrófico.
El Congreso ha hecho poco para abordar el problema desde 2010, cuando un proyecto de ley destinado a cobrar a los contaminadores por las emisiones fracasó en el Senado.
El nuevo proyecto de ley de gastos extiende un crédito fiscal existente que beneficia a la energía solar por dos años. Extiende un crédito fiscal para la energía eólica terrestre por un año y crea un nuevo crédito para la energía eólica marina. Un crédito por captura y almacenamiento de carbono, una tecnología que solo se implementa a escala comercial en un puñado de instalaciones, obtiene una extensión de dos años.
La eliminación gradual de los hidrofluorcarbonos pone a Estados Unidos en línea con un tratado de las Naciones Unidas firmado por otros 197 países. Los grupos empresariales la apoyaron, pero la medida enfrentó la oposición de algunos republicanos clave preocupados por las medidas estatales y locales más estrictas que crean un mosaico de regulaciones. La nueva medida les prohíbe regular los HFC durante cinco años.
El proyecto de ley de gastos de amplio alcance incluye una combinación de otras medidas que los ambientalistas respaldan, incluidos programas para reducir la contaminación del diésel, la transición a los autobuses escolares eléctricos y la climatización de hogares de bajos ingresos.
También revierte los recortes de la administración Trump a la Agencia de Protección Ambiental y los programas de cambio climático de la NASA y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica.