El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dicho que mientras se lleva a cabo el juicio político de su predecesor en el Senado, se centrará en aliviar el sufrimiento de la pandemia de coronavirus.
"No", respondió Biden cuando los periodistas le preguntaron el martes en la Oficina Oval si estaba viendo el juicio. “Ya hemos perdido a más de 450.000 personas y podríamos perder muchas más si no actuamos y actuamos con decisión y rapidez (...) Muchos niños se van a dormir con hambre. Muchas familias padecen inseguridad alimentaria. Están en problemas. Ese es mi trabajo. El Senado tiene su trabajo y están a punto de empezarlo, y estoy seguro de que se van a portar bien", afirmó el martes previo al inicio del juicio político.
El presidente agregó que no dirá nada más sobre el juicio político al expresidente Donald Trump, a quien Biden derrotó en las elecciones de noviembre pasado.
La respuesta de la Casa Blanca
“No es un comentarista. No va a opinar sobre los argumentos de ida y vuelta, ni los está observando”, respondió la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, cuando un periodista le preguntó el mismo martes sobre el histórico proceso.
También fue consultada Psaki acerca de que cómo Biden, como actual titular del cargo, no podía opinar sobre si es constitucional que el Senado lleve a un expresidente a juicio y si eso podría sentar un precedente peligroso para la presidencia.
Psaki no dio una respuesta directa.
"Él va a esperar a que el Senado determine el resultado de esto", dijo durante la rueda de prensa diaria de la Casa Blanca. "Su opinión es que su función debería centrarse actualmente en abordar las necesidades del pueblo estadounidense, hacer que la gente vuelva a trabajar, abordar la pandemia".
Concentrado en los problemas, no en el juicio político
La Casa Blanca busca mostrar al presidente Biden como centrado en estos temas mientras se lleva a cabo el juicio político.
La Casa Blanca ha organizado visitas de Biden al Departamento de Defensa y a los Institutos Nacionales de Salud esta semana. El próximo martes, el presidente viajará a Milwaukee, Wisconsin, donde participará en un evento televisado.
Durante la transmisión en vivo prevista para el 16 de febrero, el presidente responderá preguntas sobre los esfuerzos de su administración "para contener la pandemia de coronavirus y reactivar una economía en problemas", según informó CNN, que transmitirá el evento. La cadena explicó que incluirá "una audiencia socialmente distanciada solo por invitación".
Los funcionarios de la administración dicen que no hay ninguna ventaja política para que Biden, un exsenador y exvicepresidente, se involucre en el juicio político, que sería visto como un movimiento político tan temprano en su presidencia y en un momento en que los estadounidenses esperan que se centre en aliviar el sufrimiento causado por la pandemia.
El asalto al Capitolio no pudo detener la certificación
El mes pasado, la Cámara de Representantes acusó a Trump por incitar a la violencia contra el gobierno el 6 de enero, cuando una turba irrumpió en el complejo del Capitolio de Estados Unidos para tratar de detener la certificación de los votos electorales que afirmaban a Biden como el ganador de las elecciones de noviembre pasado.
Biden "ha emitido múltiples declaraciones transmitiendo que lo que hizo el ahora expresidente y sus palabras y acciones, y por supuesto los eventos del 6 de enero, fueron una amenaza para nuestra democracia", dijo Psaki el martes.
Trump es el primer presidente de Estados Unidos en ser acusado dos veces. La primera vez fue en diciembre de 2019, cuando la Cámara votó que había abusado de su poder y obstruido el Congreso, a raíz de una llamada telefónica de julio de 2019 en la que presionó al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky para que anunciara una investigación sobre Biden.