Un artefacto explosivo de bajo poder fue detonado en la madrugada de este jueves 30 de diciembre de 2010 en el exterior de la embajada de Grecia en Argentina, mientras que en Atenas, se registró una poderosa explosión frente al edificio de un juzgado.
El ataque en Buenos Aires fue confirmado por la policía federal argentina, que destacó que no se registraron víctimas ni daños materiales relevantes.
El ataque contra la sede judicial en la capital griega en tanto, provocó daños en varios automóviles y rompió los vidrios de ventanas del edificio, pero no causó víctimas, informó la policía. Las autoridades creen que un explosivo de fabricación casera fue colocado en una motocicleta estacionada fuera del edificio del juzgado.
"Una llamada anónima a una estación de televisión advirtió sobre un artefacto explosivo en una motocicleta estacionada fuera del tribunal que estallaría en 40 minutos", dijo un oficial policial que pidió no ser identificado. Tras el llamado, la policía evacuó el edificio.
Los ataques se producen después de que a principios de la semana siguiente a la Navidad, un paquete explosivo fuera encontrado y desactivado en la embajada griega en Roma, apenas días después de que anarquistas se adjudicaron la responsabilidad de otros ataques en las embajadas de Suiza y Chile en la capital italiana.
También la cadena de eventos parece vinculada con los sucesos de noviembre, cuando militantes de izquierda enviaron paquetes explosivos a la sedes de gobiernos extranjeros y embajadas en Atenas.
Grecia tiene un historial de décadas en episodios de violencia perpetrados por grupos izquierdistas, algunos de los cuales han ganado en operatividad desde los disturbios de diciembre del 2008.
Las autoridades europeas están en alerta máxima después del ataque frustrado de un supuesto suicida con bomba en Suecia a principios de mes.