Familias de víctimas del puente de Baltimore apelarán a la justicia

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Las familias de los fallecidos al colapsar el puente Francis Scott Key en Baltimore se disponen a presentar una demanda contra la empresa propietaria del buque que causó el accidente. ¿El objetivo de las familias? Nos lo cuenta Iacopo Luzi. 

Casi seis meses después de que el carguero Dalí se estrellara contra el puente Francis Scott Key de Baltimore, en el estado de Maryland, familias de tres de las seis víctimas, todas inmigrantes latinos, hablaron por primera vez.

En una rueda de prensa convocada por la organización Casa Maryland, las familias dijeron que buscan aún justicia, a través de una demanda, contra el propietario del buque que está tratando de limitar su responsabilidad por el accidente.

María del Carmen Castellón, Viuda de Miguel Luna, dijo:

“Honramos la memoria de nuestros seres queridos a través de esta demanda y con nuestra lucha por el cambio sistémico necesario para proteger a los trabajadores a lo largo de este país que merecen mucho mejor.”

Rodeada de algunas de las otras familias que perdieron a sus seres queridos en el colapso del Puente Key, así como algunos compañeros de trabajo, Castellón recordó a su esposo.

“La justicia significa que ningún niño tenga que crecer sin un padre. Que ninguna esposa tenga que navegar por la vida sola, que ningún nieto tenga que reconocer a su abuelo solo a través de una fotografía.”

Las familias tienen planes de apelar a la justicia para que la compañía naviera asuma la responsabilidad por la muerte de sus seres queridos. La demanda será presentada antes del 24 de septiembre.

El objetivo: evitar que un juez federal limite la responsabilidad de la empresa, según Gustavo Torres, Director Ejecutivo de CASA:

“Ellos están buscando tratar de eliminar su responsabilidad que tiene con estas familias, ¿pero saben qué? nosotros no se lo vamos a permitir”.

El alcalde y los funcionarios de Baltimore se oponen a limitar la responsabilidad de los propietarios de los barcos.

Mientras tanto, la Junta Nacional de Seguridad del Transporte y el FBI investigan de manera separada la colisión.