El presidente filipino, Rodrigo Duterte, se disulpó “profunda y totalmente” con la comunidad judía mundial el domingo, por su comparar su guerra contra los drogadictos y los traficantes con el Holocausto nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
“Me gustaría dejar claro aquí y ahora que nunca hubo ninguna intención de mi parte de denigrar la memoria de los seis millones de judíos asesinados por los alemanes. La referencia a mí fue, que era supuestamente Hitler, quien mató a muchas personas”.
Duterte admitió que sus comentarios la semana pasada, cuando dijo que estaría “feliz de asesinar” a tres millones de adictos a las drogas en una forma similar al líder de la Alemania nazi Adolph Hitler, dejaron un mal gusto en muchas bocas.
Pero agregó que no se disculpará ante los críticos de su dura y a menudo violenta represión a los usuarios, productores y vendedores de drogas.
Duterte usó un improperio contra quienes llamó “estúpidos” abogados de la Unión Europea y funcionarios de derechos humanos de la ONU que han criticado su campaña, que ha dejado aproximadamente 3.000 muertos.
Sus asesores dicen que Duterte estaba enfadado y reaccionando a comentarios de un funcionario de la ONU que comparó sus tácticas a las de Hitler y del dictador soviético Josef Stalin.
El portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner, calificó los comentarios de Duterte como “preocupantes” y un significativo alejamiento de la tradición de Filipinas de derechos humanos y dignidad.