Estudiantes regresan cautelosos a clases tras tiroteo en Florida

Bajo estrictas medidas de seguridad los estudiantes de la escuela Marjory Stoneman Douglas regresaron a clases.

Estudiantes y profesores se abrazaron y lloraron en su regreso el miércoles a la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas, por primera vez desde que un adolescente mató a 17 personas con un fusil de asalto y puso a la institución de Florida en el centro de un renovado debate sobre control de armas.

Las clases comenzaron más tarde para que los casi 3.300 estudiantes pudieran convivir con las personas con las que estuvieron durante la masacre.

"Al principio, todos estaban muy serios, pero luego comenzaron a animarse y a comportarse como lo hacían antes del tiroteo. La gente empezó a reír y bromear", dijo Kyle Kashuv, un alumno de nuevo ingreso que agregó que había abrazado a todos los profesores.

Residentes de Parkland, Florida, muestran su apoyo por los estudiantes que regresaron a clases.

Durante su entrada a la escuela, los adolescentes fueron resguardados por cientos de agentes de la policía, quienes estaban acompañados de animales de terapia, incluidos perros, caballos y un burro. Uno de los caballos tenía pintado "orgullo águila" y una mujer sostenía un cartel en el que ofrecía "besos gratis".

Luego de que acabaron las clases, miembros de la organización Guardian Angels, que vestían sus características boinas rojas, se alinearon en las calles a la altura de un paso peatonal.

Kashuv señaló que estaba sorprendido por el impresionante apoyo de la comunidad, incluida la presencia policial, los animales y las personas con buenos deseos. Había cartas de todas partes del mundo y "carteles en cada una de las paredes", agregó.

Algunos de los agentes sostenían fusiles de asalto militares y el superintendente Robert Runcie indicó que la fuerte presencia policial continuaría por el resto del año escolar. Las armas alteraron a algunos estudiantes.

"Esta es una imagen de la educación con miedo en este país. La NRA (National Rifle Association) quiere a más personas así, con las mismas armas, para asustar a más gente y vender más pistolas", dijo David Hogg, quien se ha convertido en una de las principales voces en el movimiento estudiantil para restringir las armas de fuego.

Alrededor de 150 terapeutas estaban en la institución para "brindar mucho amor, mucha comprensión" y para "facilitar" el regreso de los estudiantes a sus rutinas escolares, explicó Runcie.

El edificio donde ocurrió la masacre continuó acordonado.

El director Ty Thomas tuiteó que la "prioridad está en la preparación emocional y en el bienestar, no en el currículum, así que no hay necesidad de mochilas".

En cada aula de clases había lápices de colores, libros para colorear y pelotas de relajación para ayudar a que los alumnos pudieran hacer frente a la situación.

La entrada que lleva al campus de la escuela amaneció cubierta de flores y fotografías en recuerdo de los 17 estudiantes y profesores asesinados el Día de San Valentín en una masacre que alteró para siempre sus vidas y los empujó al centro del debate sobre armas en Estados Unidos.

Alexis Grogan, una estudiante de 15 años, planeaba usar el color de Stoneman Douglas, marrón, en el primer día de regreso a clases el miércoles, y zapatillas deportivas que dicen “MSD Strong, be positive, be passionate, be proud to be an Eagle” y “2/14/18” en honor a los que perdieron la vida.

Ella se sentía nerviosa, como que es muy pronto continuar como usualmente sin sus amigos asesinados como Luke Hoyer, que se sentaba dos asientos más atrás que ella en la clase de español. Aún, el apoyo de sus compañeros de clase, y su lucha para fortalecer las leyes de control de armas han mantenido a flote su espíritu.

“Estoy tan orgullosa de cómo los jóvenes en mi escuela han estado luchando porque todos nosotros queremos que hayan cambios, mientras vemos el progreso, realmente nos muestra que a la gente le importa y escucha lo que tenemos que decir”, dijo Grogan en un mensaje de texto.

Los estudiantes de la escuela Douglas retornaron a clase después de un torbellino de activismo político que ha reiniciado el debate sobre las armas en la nación y la seguridad en las escuelas.

El martes, familiares de las víctimas del ataque en la escuela Stoneman Douglas mantuvieron la presión en Tallahassee, la capital de Florida, con emocionados testimonios durante una audiencia legislativa para discutir la aprobación un proyecto de ley que, entre otras cosas, aumentaría el límite de edad para comprar armas de 18 a 21 años.

La ley también crearía un programa que permitiría a profesores que reciban entrenamiento de la policía portar armas ocultas en la clase, si también es aprobado por el distrito escolar. El superintendente de las escuelas ha hablado firmemente en contra de esa medida.

El gobernador de Florida, Rick Scott, dice que espera que se apruebe una legislación sobre seguridad en las escuelas.

​El gobernador de Florida, Rick Scott, quien se reunió con funcionarios en el Condado Miami-Dade el martes, dijo en conferencia de prensa que tiene la esperanza de que se apruebe un proyecto de ley sobre armas y seguridad en las escuelas antes de la sesión legislativa anual de Florida finalice el 9 de marzo.