La economía de Nicaragua caerá este año entre 3,5% y 4,5% y la recuperación comenzará en el 2020, según estimaciones del presidente del Banco Central de ese país, Ovidio Reyes, quien brindó algunos datos a medios oficiales, tras la presión ejercida por diversos sectores económicos ante la incertidumbre generada por la falta de datos estadísticos.
“Ya este año el PIB que resulte puede estar un 3 y medio, 4 y medio, 5 % dice el FMI, pero el asunto es lo que viene; ahora estamos terminando de estabilizarnos y ahora viene una especie de recuperación y esa recuperación será más rápida o más lenta, dependiendo del financiamiento”, dijo el funcionario público que durante meses permaneció sin brindar información.
Sin dar mayores cifras, el presidente del Banco Central de Nicaragua aseguró que hay señales de recuperación en el turismo, que el dinamismo del sector exportador seguirá dependiendo de cómo evolucione el mercado internacional, el sector minero se está beneficiando de precios altos en el oro, y la actividad agrícola está en positivo.
También lea Nicaragua: regresa líder estudiantil opositor Lesther AlemánSegún el funcionario público, el crecimiento económico de Nicaragua podría ubicarse entre el 1% y el 2%, en 2020, dependiendo del financiamiento externo y bancario. Sin embargo, las proyecciones no terminan de convencer a los economistas, y el experto Luis Murillo dijo en entrevista con la Voz de América que esta recuperación es improbable.
“Debido a que no se ha restituido la confianza en el sistema económico, y mientras eso no suceda estaríamos de cara a una recesión económica. Todo hace indicar que para el próximo año nosotros no estaríamos si no se resuelve esta situación de crisis política, no estaríamos de cara a un despegue económico si no más bien de cara a una depresión económica”, aseguró.
Murillo explicó que, “para poder lograr una estabilidad financiera y económica para el próximo año, se necesitarían establecer, por ejemplo, líneas de crédito para el sector productivo, se tendrían que modificar las estructura económica del país y sobre todo restablecer la confianza en el sistema financiero, recordemos que esto ha generado un problema de caída de los depósitos, caída en los niveles de crédito, perdidas de más de 2.500 millones de dólares, en riqueza de producto interno bruto, mayor desempleo y cierre de empresas”.
Sectores como la construcción y la intermediación financiera se mantienen paralizados o con baja actividad económica, lo que mantiene retenidas las expectativas del gobierno de volver a los niveles de crecimiento anteriores a la crisis sociopolítica.
En cifras, el gobierno de Daniel Ortega espera este año 5.400 millones de dólares en ingresos por exportaciones; en remesas, considera que se percibirá unos 1.600 millones. En turismo, unos 500 millones de dólares; y otros 600 millones en inversión extranjera directa.