Los científicos nucleares no cabían de alegría este miércoles, cuando entre vítores y aplausos anunciaron haber descubierto una nueva partícula subatómica, la cual "concuerda" con el largamente buscado bosón de Higgs —conocido popularmente como la "Partícula de Dios"— que ayuda a explicar qué le da forma y tamaño a toda la materia en el universo.
"Hemos hallado ahora la piedra angular que le faltaba a la física de las partículas", dijo Rolf Heuer, director de la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN, por las siglas en francés de su nombre provisional), a otros científicos.
Cuando se le preguntó si el hallazgo es un descubrimiento, Heuer respondió: "Como lego, creo que lo tenemos. Pero como científico, tengo que preguntar: '¿Qué es lo que tenemos?' "
Nadie sabe qué forma tiene y en realidad nadie la ha visto, porque saben de su existencia a partir de los resultados de las colisiones de protones de alta energía con los que investigan la materia oscura, la antimateria y la creación del universo, que muchos conjeturan ocurrió luego de la conocida como Explosión Primordial.
Se trata de un descubrimiento que no puede todavía considerarse como tal, pero que se acerca más que nunca a la explicación sobre la formación del universo. El Bosón de Higgs confirmaría el modelo de la física que aclara qué le da su masa a la materia.
Para Rob Roser, que encabeza la búsqueda en el Fermilab de Chicago, hallar la "Partícula de Dios" es como encontrar los fósiles de un dinosaurio: "Uno ve las huellas y la sombra del objeto, pero en realidad uno no ve éste", explicó.
"Hemos descubierto algo que es compatible con ser un Higgs", declaró el físico teórico británico John Ellis, del CERN. Dos equipos independientes formados por científicos de esta organización hicieron el mismo hallazgo este 4 de julio.
Científicos en Suiza hallan la piedra angular que le faltaba a la física de las partículas, que ayuda a explicar qué le da forma y tamaño a toda la materia en el universo.