Latinoamérica cerca de lograr meta contra el hambre

La mayor reducción se ha dado en América del Sur: de 60,3 millones en 1990-92 a 29,5 en la actualidad, mientras que en el Caribe la baja fue menor: de 8,1 millones de personas a 7.5 millones.

Un reporte de la FAO señala que la región redujo a 37 millones el número de personas que sufren hambre, de un total de 68,5 millones.

América Latina y el Caribe es la única región en camino de cumplir el objetivo de reducir a la mitad el número de personas que padecen hambre para el 2015, informó Naciones Unidas.

El número de personas con hambre en la región se ha reducido a 37 millones de 68,5 millones en poco más de 20 años, según el "Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional 2014" de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

Para lograr la meta establecida en la Cumbre Mundial de la Alimentación (CMA) de 2009, unas 2,75 millones de personas adicionales deben superar el hambre durante 2015.

Esto requeriría un "último empujón” a un ritmo más rápido que el promedio de 1,4 millones de personas menos que sufren hambre anualmente, según la FAO .

“Once países ya han logrado la meta de la CMA. Si a eso sumamos el renovado compromiso de la región con la lucha contra el hambre, hay razones para pensar que durante el 2015 la región completa podría dar este gran salto hacia la erradicación del hambre”, explicó en un comunicado Raúl Benítez, representante regional de la FAO.

La mayor reducción se ha dado en América del Sur: de 60,3 millones en 1990-92 a 29,5 en la actualidad, mientras que en el Caribe la baja fue menor: de 8,1 millones de personas a 7.5 millones.

Iniciativas como el Plan para la Seguridad Alimentaria, Nutrición y Erradicación del Hambre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) –que se espera sea adoptado por la próxima Cumbre de Presidentes en enero 2015–pueden dar el impulso necesario para que la región logre cumplir la meta de la CMA, según Benítez.

Para cumplir con la meta final, el informe recomendó fortalecer la integración regional, mejorar los sistemas de evaluación de las políticas públicas, y la integración de la seguridad alimentaria en los esfuerzos de desarrollo más amplios.