El actor Harrison Ford, de 72 años, está fuera de peligro tras estrellarse el jueves la avioneta que pilotaba en las inmediaciones del aeropuerto de Santa Mónica, California.
"Sufrió golpes y recibe atención médica en el hospital. Pero las heridas que presenta no ponen en peligro su vida y se espera que se recupere completamente" dijo su representante, Ina Treciokas, en un comunicado.
Los paramédicos lo encontraron "alerta y consciente", tras haber sufrido un "trauma moderado", según Patrick Butler, subjefe de bomberos de Los Ángeles.
Paramédicos "iniciaron la movilización espinal, aplicaron una vía intravenosa y comenzaron todos los protocolos médicos necesarios", agregó Butler. "Estamos muy agradecidos de que el pasajero tenía [sólo] lesiones muy moderadas", señaló.
Los informes dijeron que Ford sufrió laceraciones en la cara y posibles fracturas.
Desde el hospital, su hijo Ben Ford escribió en Twitter un mensaje en el que dice que su padre está bien a pesar de los golpes.
El actor de Star Wars informó un fallo de motor a la torre de control del aeropuerto de Santa Mónica momentos después de despegar, según el audio obtenido por TMZ.
Ford pidió "retorno inmediato" y fue autorizado a aterrizar, pero no alcanzó a llegara la pista.