La campaña de Hillary Clinton cuestiona a uno de los principales asistentes políticos de Trump por sus vínculos con un partido político pro Kremlin en Ucrania y asegura que es una clara evidencia de las relaciones del nominado republicano con Rusia.
El diario The New York Times reportó que libros contables encontrados en Ucrania muestran $12.7 millones de dólares en pagos no auditados al administrador de la campaña de Trump, Paul Manafort, provenientes del partido pro Rusia fundado por el ex presidente del Viktor Yanukovych.
Investigadores están tratando de probar si el dinero era parte de un sistema ilegal de pagos fuera del libro contable, que también podría haber hecho pagos a funcionarios electorales, según señala el diario.
“Dadas las posturas pro Putin y las políticas adoptadas por Trump y el reciente caso de piratería rusa en la divulgación de registros del Partido Demócrata, el candidato republicano tiene la responsabilidad de revelar todos los lazos de su jefe de campaña y de cualquier otro empleado o consejero con Rusia o entidades del Kremlin, incluso si algún empleado de Trump está actualmente representando y/o recibiendo pagos por parte de ellos”, manifestó en un comunicado Roby Mook, la jefa de campaña de Hillary Clinton.
Manafort ha negado haber hecho algo incorrecto.
“La respuesta más simple es la verdad: Yo soy un profesional en campañas”, dijo Manafort en un comunicado, quien tiene en su cartera de clientes internacionales al dictador filipino, Ferdinand Marcos.
Manafort expresó que nunca ha recibido ningún pago de esa índole como “falsamente” reporta The New York Times, quien agregó que su trabajo haciendo consultoría en Ucrania finalizó después que el país celebró elecciones en 2014.