El diálogo terminó pero la crisis continúa

El presidente de facto en Honduras, Roberto Micheletti, dijo a miembros de la OEA que no renunciará a su cargo para reinstaurar a Zelaya.

Una delegación diplomática ha dejado Honduras sin resolver la actual crisis política por el derrocamiento del presidente Manuel Zelaya.

Miembros de la delegación patrocinada por la Organización de Estados Americanos, OEA, partió tras conversaciones el día anterior con representantes del gobernante interino, Roberto Micheletti, y con representantes de Zelaya.

Micheletti criticó a los diplomáticos por no entender las razones por las que Zelaya fue removido por la fuerza del poder y por suspender la ayuda a su empobrecida nación.

“Por favor, les suplico, no sean malos y (no) dejen a nuestro país sin reconocerle las elecciones... este es un país noble, bueno, que no merece que ustedes hayan cerrado las ayudas financieras a Honduras”, dijo Micheletti en una efusiva declaración ante Inzulsa y la delegación de cancilleres.

La Mesa de Diálogo entre ambas partes se realizó en un hotel privado de Tegucigalpa, en donde el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza afirmó que “todos precisamos el diálogo para sanar las divisiones, evitar que los hondureños y las hondureñas sigan pagando las consecuencias de lo ocurrido”.

El equipo de la OEA también se reunió con representantes de Zelaya, quien permanece refugiado en la embajada Brasileña en Tegucigalpa.

“Para la discusión de mañana (hoy) se centrará en el punto uno del acuerdo, que es la restitución de Zelaya. Ellos (los delegados de Micheletti) quieren discutir al acuerdo de atrás hacia adelante, nosotros insistimos en discutirlo en orden”, apuntó Juan Barahona, quien representa al Frente de Resistencia contra el Golpe de Estado, el cual demanda la restitución de Zelaya.

Los delegados del presidente de facto y del depuesto Zelaya acordaron revisar el acuerdo de San José como primer punto de una agenda que aún no termina.

El grupo de Zelaya insiste en que las elecciones presidenciales previstas para noviembre tienen que ser postergadas si él no es reinstaurado para el 15 de octubre.

La crisis en Honduras estalló el 28 de junio cuando Zelaya fue derrocado por los militares que lo expulsaron del país tras intentar modificar la constitución. El Congreso nombro a Micheletti como gobernante, quien sostiene que no hubo golpe de Estado sino una sucesión presidencial.