"Hola Honduras, lo hemos logrado", así se le escucha decir desde un comunicador satelital que llevaba consigo el hondureño Ronald Quintero, quien contó a la Voz de América cómo vivió las emociones a 8.848 metros sobre el nivel del mar, y hacer historia para su país.
Quintero, originario de la comunidad de Camasca, Departamento de Intibucá en Honduras, ha conquistado 5 de las 7 cumbres más altas del mundo y aseguró que su próximo ascenso será en la Antártida.
“Pensé en mi hija, mi país, mi esposa y todo el entrenamiento y los sacrificios que había hecho”, contó.
El atleta admitió que “fue un momento de emociones encontradas” porque llegar es solo la primera parte del camino. “Estás contento porque lo acabas de lograr, pero también te preocupas porque tienes que hacer un descenso con la mayor seguridad posible”, explicó.
En los 38 días que duró su aventura, Quintero, casi perdió un dedo de la mano por hipotermia después de que el guante se le rompió, pero no desistió de su objetivo.
“Hubo días que estábamos agotados, pero espiritualmente muy motivado, por 38 días, traté de mantenerme motivado”, narró.
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EEUU motivó su ascenso
Quintero dijo a la VOA que fue en Estados Unidos donde nació la pasión por el alpinismo.
A la edad de 16 años, después de pasar por muchas adversidades, las circunstancias lo obligaron a migrar para reunirse con su madre y precisamente fue en ese tiempo que vivió en Berkeley, California, cuando comenzó su pasión por este deporte.
Su primera conquista llegó en el 2012, cuando alcanzó el monte Whitney, conocido por ser la cima más elevada de EEUU con una altura de 4.421 metros y se encuentra en el Condado de Inyo.
Años después, ha visto nuevos frutos de su esfuerzo y pasión y quiere inspirar con sus hazañas.
“[Que su logro] sirva de motivación para que todos los hondureños logren sus propósitos”, afirmó.
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