El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, instó el lunes a China a revelar los detalles de las personas que murieron, fueron detenidas o desaparecieron durante la represión militar de las protestas prodemocracia celebradas en la plaza de Tiananmen, en Beijing, hace 29 años.
Pompeo conmemoró el aniversario de la supresión de las manifestaciones, el 4 de junio de 1989, diciendo: “Recordamos la trágica pérdida de vidas inocentes”.
Cientos, si no miles, de manifestantes desarmados y espectadores fueron asesinados a última hora del 3 junio y en la madrugada del 4 de junio de 1989, luego de que los líderes comunistas del país ordenaron al ejército recuperar el control de la plaza ante las protestas lideradas por estudiantes.
El tema sigue siendo tabú en la China continental y cualquier forma de conmemoración, ya sea pública o privada, está prohibida. En Hong Kong, sin embargo, decenas de miles de personas se reúnen cada año en el Parque Victoria el 4 de junio por la noche para recordar a las víctimas. Es el único homenaje a gran escala en territorio chino.
En Hong Kong, los organizadores de la vigilia nocturna pretenden emplear lemas pidiendo el “fin de la dictadura de partido único” pese a las advertencias de funcionarios proBeijing sobre posibles repercusiones.