En un operativo conjunto, la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) en colaboración con las autoridades del orden a nivel local lograron arrestar a casi 1.000 pandilleros y otros criminales.
El operativo denominado “Wildfire” se realizó durante seis semanas en más de 282 ciudades en todo el país y permitió el arresto de 976 pandilleros y 231 criminales que violaron las leyes a nivel federal incluidas leyes migratorias.
La mayoría de los pandilleros están asociados a los denominados Sureños, Norteños, Bloods, Crips, pandillas de Puerto Rico y varios grupos pandilleros con base en las prisiones.
“Los pandilleros inyectan violencia y miedo a nuestras comunidades y sin la intervención de las fuerzas del orden, estos grupos se pueden esparcir como el cáncer”, dijo la directora del ICE Sarah R. Saldaña.
Esa es la razón por la que ICE trabaja con las fuerzas del orden alrededor del país para erradicar toda actividad criminal donde sea que suceda”, agregó Saldaña.
La mayoría de los criminales son estadounidenses, sólo 199 provienen de diferentes países de Sudamérica, Centroamérica, Asia, Africa, Europa y el Caribe.