Indígenas bolivianos contra Morales

El presidente de Bolivia, Evo Morales recibido por comunidades indígenas durante la campaña electoral, un apoyo que se ha ido debilitando.

El gobierno de Bolivia acusa a la Agencia de Desarrollo Internacional del gobierno estadounidense, USAID, de promover la movilización.

Grupos indígenas de la Amazonía de Bolivia anunciaron que iniciarán una caminata en reclamo por demandas sectoriales, que se prolongará de tres a cuatro semanas, a través de 900 kilómetros, hasta llegar a La Paz.

La medida, es un nuevo ejemplo del distanciamiento entre los movimientos indígenas que apoyaron a Evo Morales, en sus dos campañas bien sucedidas a la presidencia, y el mandatario. Sin embargo, el gobierno boliviano acusa a la Agencia de Desarrollo Internacional, del gobierno estadounidense, USAID, promover la protesta.

La marcha comenzará en la ciudad de Trinidad, capital del departamento de Beni, a 900 kilómetroos al noreste de La Paz, exigiendo al presidente Evo Morales mayores recursos para las comunidades indígenas.

"La marcha hacia La Paz se iniciará el jueves desde la ciudad de Trinidad porque el gobierno no escuchó nuestras demandas", afirmó Pedro Nuni, diputado y dirigente de los indígenas de llano y la Amazonía.

El gobierno en cambio, a través del ministro de Autonomía, Carlos Romero, prefiere señalar a la USAID como promotora de la manifestación de protesta. La agencia estadounidense destina anualmente unos 100 millones de dólares en obras sociales.

La etnia de los guaraníes decidió a última hora no participar de la protesta después que el gobierno cerró acuerdos con la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG) que habita el sudeste y dividió al movimiento indígena.

Los guaraníes, con más de 90 mil miembros, constituyen la tercera etnia después de los quechuas y aymaras y viven en tres departamentos.

La marcha tiene como objetivo reclamar al gobierno una nueva delimitación territorial y que los estatutos de autonomía se aprueben mediante usos y costumbres, en cabildos, y no en un referendo como propone el gobierno.

La Constitución vigente desde el año pasado reconoce autonomía a los pueblos indígenas sin alterar la actual delimitación territorial porque podría desencadenar conflictos con municipios, advirtieron las autoridades. La Constitución boliviana reconoce a 36 pueblos indígenas.

"No es posible que se eliminen los límites departamentales, eso no está en la Constitución", dijo el martes Morales al descartar el pedido de los nativos de tierras bajas.