El palacio de St James hizo el anuncio de la posible fecha sobre el nacimiento del bebé real.
El hijo del príncipe Guillermo y su esposa Kate Middleton esperan su primogénito para el mes de julio, anunció este lunes el palacio de St James, dando por primera vez una indicación de fecha sobre el nacimiento del bebé real.
“Sus altezas reales el duque y la duquesa de Cambridge están encantados de confirmar que esperan un bebé para julio”, señala el comunicado de la secretaría del segundo en la línea de sucesión al trono británico y de su esposa excluyendo al mismo tiempo la hipótesis que barajaron algunos diarios de que fueran gemelos.
El texto señala que el estado de salud de Kate, que tuvo que ser hospitalizada en diciembre por náuseas ligadas a su incipiente embarazo, “continúa mejorando” después de haber superado el primer trimestre.
Kate, que la semana pasada cumplió 31 años, estuvo ingresada del 3 al 6 de diciembre debido a una hiperméresis gravídica, una forma severa de náuseas y vómitos padecida por una pequeña proporción de gestantes que se acompaña de pérdida de peso y deshidratación.
La hospitalización de la duquesa obligó al palacio a precipitar el anuncio de la llegada de un futuro heredero antes de que la duquesa alcanzara las 12 semanas de embarazo, poniendo fin a las especulaciones que comenzaron inmediatamente después de su boda con Guillermo, el 29 de abril de 2011.
Desde entonces sólo ha sido vista tres veces en público, la última el viernes cuando visitó la National Portrait Gallery para la presentación de su primer retrato oficial.
“Sus altezas reales el duque y la duquesa de Cambridge están encantados de confirmar que esperan un bebé para julio”, señala el comunicado de la secretaría del segundo en la línea de sucesión al trono británico y de su esposa excluyendo al mismo tiempo la hipótesis que barajaron algunos diarios de que fueran gemelos.
El texto señala que el estado de salud de Kate, que tuvo que ser hospitalizada en diciembre por náuseas ligadas a su incipiente embarazo, “continúa mejorando” después de haber superado el primer trimestre.
Kate, que la semana pasada cumplió 31 años, estuvo ingresada del 3 al 6 de diciembre debido a una hiperméresis gravídica, una forma severa de náuseas y vómitos padecida por una pequeña proporción de gestantes que se acompaña de pérdida de peso y deshidratación.
La hospitalización de la duquesa obligó al palacio a precipitar el anuncio de la llegada de un futuro heredero antes de que la duquesa alcanzara las 12 semanas de embarazo, poniendo fin a las especulaciones que comenzaron inmediatamente después de su boda con Guillermo, el 29 de abril de 2011.
Desde entonces sólo ha sido vista tres veces en público, la última el viernes cuando visitó la National Portrait Gallery para la presentación de su primer retrato oficial.