“El asalto a Globovisión me pareció francamente fuerte”, aseguró el secretario general de la Organización de los Estados Americanos, José Miguel Insulza, quien estuvo el martes en Montevideo para una conferencia interamericana de seguridad pública.
Insulza dijo que no quería “ahondar” mucho en el tema porque antes debía conversarlo con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
No obstante, consideró que la situación “es ciertamente preocupante”.
El lunes, un grupo de 35 militantes armados al mando de la dirigente chavista Lina Ron atacaron la cadena de noticias Globovisión en Caracas con dos bombas lacrimógenas. Los militantes iban armados y sometieron al personal de seguridad.
La Comisión de Derechos Humanos expresó “su profunda preocupación por el deterioro de la situación del derecho a la libertad de expresión en Venezuela”, según un comunicado publicado el 3 de agosto.
“Desde el año 2000, la CIDH ha venido observando una paulatina vulneración del ejercicio de este derecho en Venezuela y una creciente intolerancia a la expresión crítica”, agregó.
Insulza también habló con los periodistas sobre otros temas regionales que preocupan a la OEA tales como el golpe de Estado en Honduras y el deterioro en las relaciones entre Colombia y Venezuela.
Con respecto a la situación en Honduras, el secretario general de la OEA dijo que el miércoles tendrá una reunión con los embajadores de la OEA, y el jueves dará más detalles sobre una “misión de nivel ministerial” que irá a Honduras.
“Vamos a hacer todos los esfuerzos para restaurar la institucionalidad”, aseguró, aunque precisó que la OEA tiene ciertos límites a la hora de actuar y no va a intervenir en Honduras.
“Estamos tratando de obtener de parte del gobierno de facto una decisión de hacerse al lado y permitir que vuelva la democracia prontamente”, dijo Insulza.
Por otra parte, Insulza dijo que la OEA podría intermediar en el conflicto entre Colombia y Venezuela, ya que tienen mucha experiencia “en el tratamiento de temas de frontera”, pero no se convocó la participación del organismo.
“Ambos países tienen que solicitarlo”, explicó.
Venezuela “congeló” las relaciones diplomáticas con Colombia y ordenó el retiro de su embajador en ese país tras acusaciones del gobierno colombiano de supuestos vínculos entre las FARC y el gobierno de Hugo Chávez.